Ni el mejor de los autores habría imaginado una historia tan perfecta como la que esta temporada ha vivido la Cultural. Maravillando con su juego, cruzándose con el Real Madrid en Copa, enganchando a su ciudad, logrando 42 años después regresar a Segunda A y proclamándose campeones de Segunda División B.Lograron el título los de Rubén de la Barrera de la mejor manera, levantando en un cuarto de hora final sensacional el 0-1 del Lorca e imponiéndose por 3-1 gracias a un mágico Toni, que un día más se echó el equipo a sus espaldas y participó en los tres tantos aunque éstos llevaran la firma de Molo en propia puerta, Benja y Gallar.
Gallar estrelló en el larguero una falta en la mejor ocasión de una primera parte con poca intensidad y sin oportunidadesUna remontada para levantar a la grada y poner el final perfecto a un año de ensueño. Una victoria que hacía justicia a un equipo que ha batido todos los récords de la categoría y que logra inscribir su nombre en su palmarés de ganadores absolutos. Una excusa para repetir la fiesta que ya se habían ganado los héroes que han conseguido devolver al fútbol profesional a León.
Y eso que, durante muchos minutos, al partido le faltó intensidad, algo lógico en una eliminatoria de este tipo que llega apenas unos días después de cumplir el objetivo y celebrarlo por todo lo alto. Vallejo, Forniés de central, Antonio y Ortí eran las rotaciones de un De la Barrera que buscaba el título con mayoría de titulares; en una fórmula parecida a la de un David Vidal que, exceptuando en la portería y en las tres piezas clave que ni viajaron, ponía su once de gala en liza.
Sin embargo, durante la primera parte, apenas hubo ocasiones ni llegadas. Más allá del pasillo inicial, que el Lorca devolvía a la Cultural tras habérselo hecho los leoneses el jueves en su campo, el partido transcurría sin apenas acciones de interés, siendo las llegadas más peligrosas las de un equipo visitante liderado por un gran Noguera y que pisaba en varias ocasiones con peligro el área culturalista, aunque errando siempre o en el último pase o en el remate.
Noguera, tras una gran jugada de Ojeda por banda, hizo el 0-1; pero tras él entraron Colinas, Iago y Ortíz y el partido cambió Pero, al filo del descanso, llegó la gran oportunidad. Fue en una falta al borde del área, circunstancia que con la tremenda efectividad mostrada por Gallar en los últimos meses es sinónimo de claro peligro. Estaba lejana pero el extremo, este domingo teñido de rubio al igual que Yeray e Iván, no dudó en buscar puerta, sacándose un genial disparo por encima de la barrera que pegaba en el larguero, botaba en la línea y golpeaba en la espalda del portero.
Acariciaba el gol la Cultural, pero quien lo conseguía en la reanudación era el Lorca. Había empezado más movida la segunda parte, con los equipos más activos y verticales, y dos llegadas de Carlos y Benja en los dos primeros minutos, y a los 14 se producía el 0-1.
Fue en una gran acción por la banda izquierda de Dani Ojeda, que se marchaba por velocidad de Iván González, que con tarjeta no podía frenarle, y que aunque le encimaba no impedía que se sacara casi en la línea de fondo un centro que en el segundo palo Noguera remachaba al fondo de las redes.
No obstante, con el partido en contra, apareció la mejor Cultural. Influyeron sin duda en ello también los cambios, pues De la Barrera metió en el campo al siempre peligroso Colinas, a un Ortiz que se adueñó del centro del campo y a un Iago que, como lateral derecho, acabó siendo decisivo con sus subidas.
La remontada llegó con 2 goles iguales: ‘jugadón’ de Toni, pase a Iago y centro que metían una vez un defensa y otra Benja Así, las oportunidades que durante todo el encuentro habían brillado por su ausencia, empezaron a sucederse. Primero por parte de la Cultural, con un centro desde la banda de Gallar, el más constante del ataque culturalista, que Ortiz cabeceaba solo casi en el área pequeña pero cruzaba demasiado y se marchaba pegado al palo.
Después dando por dos veces la opción de sentenciar al Lorca, primero con un mano a mano de Ojeda, a quien habilitaba con un pase por dentro Noguera y dejaba solo ante Vallejo, que le sacaba su disparo a bocajarro; y después con un tiro de Manel, que también solo aunque en la frontal, pegaba horriblemente al balón.
Perdonaban los murcianos y no lo haría ya la Cultural, que en apenas nueve minutos marcaba tres goles y en sólo cuatro le daba la vuelta al partido con dos tantos que tenían dos protagonistas claros: Toni y Iago Díaz.
La Cultural, que en 9 minutos metió sus 3 goles, sentenció en un contraataque en el que marcó Gallar a centro de Toni ¿En el 1-1? El mediapunta se zafaba con una gran maniobra de un rival y abría en el momento justo para la incorporación, en posición dudosa, del ayer lateral, que pisaba área y ponía un centro que Molo introducía en su propia portería. ¿El 2-1? Repetía condicionantes y cambiaba la manera de llegar al desenlace final: gran jugada de Toni, apertura para Iago y centro que esta vez era Benja quien remachaba al fondo de la red.
El Reino era un clamor. Una pequeña ración de la mejor Cultural valía para ganar al otro ascendido por la vía rápida. Y aún quedaba otro gol. El de uno de los ya ídolos de la afición ‘blanca’. El de Álex Gallar. El que demostraba que los leoneses la tocarán como los ángeles, pero que aún más letales que con su estilo preferido lo son al contraataque. Porque una pérdida visitante tuvo el máximo castigo, pues provocó un balón a la banda derecha para Toni, que conducía unos metros y, con superioridad culturalista en el área, encontraba libre de marca en el segundo palo al extremo, que controlaba y cruzaba a la perfección su disparo, que entraba pegado al palo derecho.
Era el broche dorado. Era el justo final a un equipo que ya es historia.