Felipe Llamazares: "Segunda A es la división de partida de la Cultural, a partir de aquí hay que construir"

Entró a la Cultural cuando el club intentaba salir de uno de los momentos más complicados de su historia y acaba de ser protagonista de un hito que desde hace décadas se llevaba esperando. Es el director general Felipe Llamazares, que analiza en una entrevista en la sede de La Nueva Crónica todo lo que ha dado de sí la temporada y marca las líneas que se seguirán el año que viene.

–Pasados los días y, ya más en frío, ¿se empieza a creer uno lo conseguido?
–Se empieza a creer porque no es azar, es un trabajo de planificación. Hemos trabajado en hacer una estructura del club profesionalizando la parte económica y deportiva, y creando los cimientos para estar preparados para esto.

–¿Cuáles cree que han sido las claves que han llevado a este ascenso?
–Tener claro que el proyecto era más importante que el éxito y que los objetivos no pueden estar diariamente en la vista, sino que tienen que ser el día a día y el disfrutar del camino, porque eso te hace llegar a la meta. Si desde el principio hubiéramos hablado de ascenso habríamos estado distrayendo energías.

Nos iremos a un presupuesto realista en función de los ingresos, no como en Segunda B que Aspire cubría el desfase–Aspire asentó el club económicamente nada más llegar pero, ¿cuándo se da cuenta de que con el proyecto que va a tener este año el ascenso es una opción muy real?
–En marzo del año pasado, cuando empezamos a planificar la temporada, lo hicimos ya con la idea de ascender. Nuestro mensaje era distinto porque era el que teníamos que lanzar, pero se invirtió dinero en una plantilla de Segunda División A.

–Esa apuesta de Aspire se verá también reconocida por el premio ‘Negrilla de Oro’ que entrega ‘La Nueva Crónica’, ¿reconocimiento muy merecido?
–Sí, porque además se escogió el momento justo. Se podría haber malinterpretado al subir, pero se dio cuando estábamos terceros. Es un buen espaldarazo social que se reconozca a Aspire, con el tiempo la historia reconocerá cómo Aspire creyó y apostó por León, y con sus aciertos conseguimos meter al equipo arriba.

–¿Ha tenido finalmente Aspire que cubrir mucho déficit este año?
–El partido con el Real Madrid ha amortiguado el gran déficit. La Segunda B es deficitaria, el club estaba como estaba porque cada año se generaban 600.000 o 800.000 euros de deuda con plantillas medianas y un millón con una cara. El planteamiento era subir en dos años a Segunda, porque este año ese déficit lo enjugaba la propiedad, que además luego acierta con la inversión.

–¿Te esperabas que pudiera crearse esa comunión con la afición?
–Ni en el mejor escenario de los posibles hubiese imaginado una evolución de la masa social leonesa hacia la Cultural como la que ha habido. El ascenso está bien, pero eso es de lo que más orgullosos nos sentimos. El leonés necesita de signos para reafirmarse, tenemos que dejar de quejarnos de Valladolid o de Madrid, eso es de perdedores, León no tiene que tener complejos. La Cultural es una bandera de la que los leoneses tienen que sentirse orgullosos, y de hecho ya se sienten. Hemos bajado nuestra media de edad, hay muchos niños. Hay un testigo, Julio Llamazares, que estuvo comiendo con Antonio Martín y conmigo, y sabía cuál era nuestro objetivo, pero es que queríamos el 50% de lo que finalmente tenemos.

«Fue clave tener claro que era más importante el proyectoque el éxito. Disfrutar el camino te permite llegar a la meta»–¿Es más complicado enganchar a la gente o mantenerla?
–Es más complicado enganchar, porque la afición estaba desilusionada, se le dieron muchos palos. Los leoneses somos de lo mejor en mucho, pero intentamos siempre sacar lo peor y era normal que estuviese así. Ahora les hemos recuperado y toca mantenerlo.

–¿En qué cosas tiene que adaptarse la Cultural con el ascenso a Segunda A?
–Hemos sido previsores, construimos un proyecto y estructuras. Tenemos una estructura económica por encima de un equipo de Primera División, es un verdadero lujo lo que tenemos, y a nivel deportivo estamos a niveles de Primera, con un director deportivo y un Santi Santos que es un lujo tenerle en esta faceta. Tenemos un nivel de organización de eventos por el que nos ha felicitado la UEFA, sólo queda adaptar pequeñas cosas, en comunicación y poco más. Además, contamos con un gran grupo humano, repleto de buenas personas y gente integrada e implicada.

–Hay muchísima gente pendiente de la campaña de socios para Segunda A. ¿Sabéis ya en torno a qué lineas girará?
–Va a haber un equilibrio entre premiar la fidelidad y que los mejores sitios sean más caros que los menos buenos del estadio. Además, ampliamos la oferta con la tribuna este, así que habrá más posibilidades y vamos a ir equilibrando todas esas variables.

–¿A cuántos socios le gustaría llegar?
–Me gustaría llegar a 10.000 socios. Es una cifra muy alta, pero vamos a poner todas las bases. El aficionado tiene que tener claro que cuantos más ingresos de socios y de publicidad tengamos, mejor plantilla vamos a tener, si llegamos a 10.000 socios vamos a tener mejor mejor plantilla que si tenemos 8000.

–¿Cuándo está previsto que salga la campaña?
–Antes del 30 de junio tendremos la campaña en la calle.

«De lo que más orgullosos nos sentimos es de la evolución de la masa social hacia la Cultural, el objetivo son 10.000 socios»–¿Qué presupuesto tendrá el año que viene el equipo?
–No lo sabemos, sabemos que nos pueden llegar cinco millones de la televisión y lo haremos cuando veamos la previsión de ingresos que tengamos. Nos vamos a ir a un presupuesto realista, a tantos ingresos tanto presupuesto, no es como Segunda B que el desfase entre lo que ingresamos y lo que necesitamos para ascender lo cubría Aspire.

–¿El objetivo para esta primera temporada en Segunda A es la salvación?
–El objetivo es asentar fácilmente el equipo. Esta es la división de partida de la Cultural, a partir de aquí es donde hay que construir todo.

–Ha habido muchas quejas hacia Hummel por la falta de stock de camisetas o las equipaciones del filial y de la juvenil. ¿Cómo está la situación con la marca deportiva?
–Con Hummel está estupendamente, el problema es que hemos sido prudentes y no quisimos arriesgar a encargar 3.000 camisetas que si no las vendemos nos las tenemos que comer. La camiseta del equipo es sólo nuestra, la diseñé yo con Hummel en Elche y para hacer una cosa así con una firma hay que encargar 1.000 camisetas, que aún así por las relaciones con Hummel nos permitieron hacer 600 y hemos pedido tres reposiciones. La rosa la tienen en stock, no nos la tienen que hacer exclusivamente para nosotros, por lo que vamos pidiendo según vamos vendiendo. Por lo que respecta a la equipación del filial y juvenil es un principio de austeridad, que la Cultural lo tiene y lo va a tener siempre. No hay que tirar aquello que vale, porque cuesta dinero y con Aspire hay muchísimo rigor, por lo que reutilizamos las equipaciones del primer equipo en el segundo.

–¿Seguirán por tanto la próxima temporada con Hummel?
–Sí, toda la equipación del año que viene está ya en el almacén.

–¿Cómo marcha la creación de la Federación de Peñas?
– Ya está constituida y hay un responsable, todas las peñas se irán sumando y en ellas caerá la responsabilidad de, manteniendo la independencia con el club porque eso nos va a ayudar a que no pierdan la parte crítica, tengan también la responsabilidad de organizar esos asuntos que no son competencia del club. Tanto en eso como en el área social, que ha crecido mucho, hay que romper una lanza por Juan Luis Díez. Esto está cambiando y es, por un lado por el trabajo que se ha hecho, y por otro por la locomotora que lo mueve, que es el fútbol que se ha hecho, los jugadores y los triunfos.