Clemente acusa a Vestas de una deslocalización “sin piedad” y anima a apostar por los recursos propios

La presidenta de las Cortes autonómicas, Silvia Clemente, aludió este sábado al anuncio de cierre de la planta de componentes eólicos de Vestas en Villadangos del Páramo y lo hizo para referirse a una producción “que se puede deslocalizar y lo hace con mucha facilidad y además sin ninguna piedad”. Una realidad, dijo, que debe invitar a la reflexión y servir también para apostar por potenciar los recursos propios, insistiendo en “lo que nosotros sabemos hacer y en lo que sabemos hacer y está en nuestra tierra”.

“Ni nuestro patrimonio histórico se puede deslocalizar, ni nuestros recursos forestales se pueden deslocalizar, ni nuestra producción de materias primas, ni nuestra industria agroalimentaria ligada a ellas se puede deslocalizar”, remarcó durante su intervención en la inauguración de la XIII Feria del Dulce de Benavides de Órbigo, a pocos kilómetros de la factoría de la multinacional danesa.

Hay que desarrollar, recalcó, aquello en lo que se es fuerte, “y en eso es en lo que tenemos que crecer a lo largo y ancho de toda nuestra comunidad”. Por eso, dijo, “este granito de arena que es esta Feria del Dulce es una feria importante. Es lo que hay que hacer, propiciar el crecimiento de lo que es nuestro, sabemos hacer muy bien y nadie puede cambiar de sitio en su producción”.

Clemente subrayó que el sector agroalimentario supone un yacimiento de empleo importante en toda Castilla y León, junto con el turismo y la riqueza forestal y, por ello, implica “una oportunidad de negocio, de crecimiento cierto y una herramienta para combatir la despoblación. En el caso de la repostería artesanal, el medio rural supone el aporte más relevante a un sector en auge y todavía incipiente en el entorno urbano.