A la sexta fue la vencida para el Abanca Ademar, que condicionado por la dureza de sus rivales todavía no había ganado esta pretemporada, y se estrenó frente a un conjunto categoría inferior, el Burgos, que le puso en más problemas de los esperados en la primera parte pero al que acabaron barriendo en la segunda para imponerse por 43-31.Un amistoso que los de Cadenas volvieron a afrontar muy cortos de rotación, puesto que no estaban por lesión Milosavljevic, Kim ni Zanas Virbauskas, y que dejó como nota positiva el ataque, donde tanto en estático como en transición el equipo fue sobrado, pero como negativa las dudas de su defensa, que naufragó en una primera mitad donde un equipo de Plata como el burgalés le metió 21 goles.
No funcionó Panos, que sí se activó tras el descanso, y volvió a tampoco hacerlo Honrado, en una de las claras carencias que el Ademar tiene pero confía en paliar con la llegada de Saeid. Pero es que tampoco les acompañó el 6-0, con muchas dudas y huecos que permitían tiros claros, ni el 5-1 que tras no usarse apenas el año pasado este verano sí está probando Cadenas, casi siempre poniendo de avanzado a un Darío Sanz que está dejando muy buenas sensaciones durante la pretemporada.
El central Javier Miñambres se estrenó con un Ademar sin Kim, Marko ni Zanas y que fue de más a menos Eso hizo que el Burgos mandara durante gran parte de la primera mitad, con ventajas de hasta tres goles y ganando por última vez con el 16-17, pues un tirón en el tramo final permitió irse ya 24-21 al descanso a un Ademar que, tras el intercambio de los primeros 10 minutos de la segunda mitad (31-27), hizo valer la lógica y a través de una mejora atrás cogió una gran diferencia.
Clave en ello fue el acierto en el pivote tanto de Santista como de Tiago, los lanzamientos de Boskos, la efectividad de Antonio o la conexión entre Juan Castro y David Fernández, que lleva camino de marcar diferencias en la liga. Volvió a brillar en la dirección el central y fue definitivo el lateral, demostrando que están llamados a marcar diferencias pero también volviendo a jugarlo casi todo, en algo que está convirtiéndose en tónica entre las piezas claves pese a ser pretemporada.
Y es que aunque enfrente había un rival de categoría inferior volvió a tomarse el choque muy en serio el Ademar, con una rotación similar a la de un choque oficial en la que eso sí, en los minutos finales, se estrenó con el primer equipo ademarista uno de los canteranos que están realizando la pretemporada, el central Javier Miñambres.