Adiós al ‘playoff’ tras perder a su estrella en el día más decisivo

El Aros pierde 50-68 con el líder Bizkaia tras lesionarse Sinclair en la primera mitad / La falta de acierto en ataque condenó a la derrota a las leonesas

L.N.C.
04/04/2015
 Actualizado a 05/09/2019
Lucía Pablos se dispone a dejar una bandeja. | L.N.C.
Lucía Pablos se dispone a dejar una bandeja. | L.N.C.
El Aros León Cuna del Parlamentarismo tiene muy complicado alcanzar la fase de ascenso. Las leonesas cayeron derrotadas 50-68 en su despedida en casa de la temporada frente al líder, Ibaizabal, en un encuentro marcado por la lesión de Aulani Sinclair que dejó huérfano de una referencia interior al equipo de Moses durante 25 minutos. Sólo un tropiezo del Arxil o el Cortegada devolvería esperanzas de pelear por el ascenso a la escuadra leonesa.

Las chicas del Aros llegaban al encuentro con la dosis de moral que les daba depender de sí mismas para estar en la fase de ascenso y con el aporte que daba la llegada de Tanya Bröring que debutaba con las de Moses. El problema es que todo eso quedó compensado con el mazazo de la lesión de Aulani Sinclair en una jugada tonta en la que ella sola se hizo daño en la rodilla dejando al equipo huérfano de su referencia interior.

Los primeros momentos de duda tras la lesión de la pívot estadounidense los aprovecharon las vascas para irse arriba en el marcador, aunque las leonesas no pensaban regalar el partido antes de tiempo.

Debutó con el Aros Tanya Bröring, fichada en febrero lesionada y a la que esta semana dieron el alta médica  No entraban los triples, pero la defensa impedía canastas fáciles del talentoso equipo de Galdácano que, poco a poco, iba marcando su escapada hasta colocarse nueve arriba en el minuto 25. Era otro momento crucial y las leonesas se crecieron con un parcial de 7-0 que volvió a meterlas en el partido, aunque cinco minutos de sequía permitía escaparse de nuevo al Ibaizabal.

Al Aros no le abandonaban las ganas de remontar, pero la cabeza ya iba por un lado y el corazón latía a muchas más revoluciones y eso casi nunca es un buen aliado. Como seguían sin entrar los lanzamientos, el partido se ponía casi imposible (41-55) a seis minutos del final. Ya sólo quedaba apelar a la heroica y al Aros no se le podrá decir que no lo intentó, pero éste no era el día y al final sólo pudieron ver cómo las vascas le endosaban una derrota mucho más amplia de lo que merecieron y que salvo tropiezo del Arxil o el Cortegada, hará imposible la presencia de las leonesas en la fase de ascenso.
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