Antonio Martínez se mete en la pelea por hacer historia

Parecía que a Antonio Martínez se le había escapado ya el tren de convertirse en máximo goleador de la liga, pero la exhibición que dio en su despedida del Palacio de Deportes como jugador del Ademar le ha devuelto de lleno a la pelea por hacer historia.

Y es que el extremo leonés, que por segunda vez en la presente temporada se fue hasta los 15 goles en un partido, después de repetir ante el Valladolid lo que ya había hecho frente al Huesca, se pone a falta de sólo una jornada para que termine la competición a sólo cinco tantos del lateral zurdo del Cuenca Joaquim Nazaré, que llegó también hasta los dobles dígitos al hacer 10 ante el Cangas.

181 goles lleva Antonio por 186 de Nazaré, siendo en la última jornada eso sí mucho más complejo el duelo del ademarista, que visita al imbatible FC Barcelona, mientras que Cuenca visita al Torrelavega y lo hace además dos días después del choque de los leoneses (que juegan el jueves a las 20:00), si bien todavía tienen en juego la segunda plaza por lo que tendrán cosas más importantes en lo que pensar.

Sólo dos jugadores de Ademar han sido máximos goleadores de liga: Skrbic en 1997 y Carrillo en 2014 En caso de conseguir proclamarse campeón, Antonio Martínez se convertiría en el pichichi más joven de la historia de la liga Asobal, pues lo lograría con sólo 20 años y un mes, batiendo el registro del que ahora es uno de los mejores jugadores del mundo, un Alex Dujshebaiev, que lo fue en 2013 con el Aragón cuando tenía 20 años y 5 meses.

Además, se convertiría en el tercer jugador del Ademar en conseguir ser máximo goleador de una temporada. Lo fue hace más de un cuarto de siglo Dragan Skrbic, que metió más tantos que nadie en la temporada 1996/97, donde se fue a más de ocho por partido; y lo consiguió también hace nueve años, en la campaña 2013/14, un José Mario Carrillo que rozó los seis.

Lo tuvo también cerca hace dos años Gonzalo Pérez, que llegó con opciones a la última jornada pero acabó cediendo en beneficio del vallisoletano Jorge Serrano. Ahora, la película vuelve a repetirse con un ademarista presente. Y Antonio Martínez confía en poder darle otro final.