Era una de las principales debilidades de la Deportiva esta temporada y ya desde la jornada dos le empezó a costar puntos a los de Javi Rey.
Los dos goles en Segovia, el segundo para empatar un partido que se había remontado, el primero contra el Arenteiro para abrir el marcador o sin ir más lejos el del Real Unión para empatar un partido en el que la Deportiva se había puesto por delante hasta en dos ocasiones, fueron las veces que los balones parados castigaron con puntos a los bercianos.
Sin embargo, también a anotado goles de estrategia, los dos de Sibille, el primero en Andorra y el segundo contra el del Zamora, solo dos y con los mismos protagonistas, el central argentino y Yeray. Por ello hasta el momento los córners o las faltas laterales estaban perjudicando más que favoreciendo.
El balón parado le había quitado varios puntos a la Deportiva con 4 goles, pero en Barakaldo sumó tres
Pero en Lasesarre se vio un versión distinta, en defensa al contundencia en los balones parados se palpó desde el primer minutos y en estas acciones la Deportiva no cedió ni un solo tiro, además de que el único gol del partido llega en una jugada de pizarra desde la esquina para que Mula sumase su cuarta asistencia, Álex Costa su cuarto gol y posteriormente la Ponferradina la victoria.
Ante el Barakaldo las acciones a balón parado pasaron a sumar y no a perjudicar como estaba acostumbrada la Deportiva y se logró una victoria vital por el momento que se pasaba.
Error con el gol de Costa
El árbitro cometió un fallo a la hora de redactar el acta del partido y es que el gol de la Ponferradina se lo anotó a Lancho, que de hecho el central ni participa en la jugada, y es únicamente Costa.