Hace menos de dos semanas, el Guadalajara cortaba la histórica racha de victorias del Barcelona. Un logro sonado y que el balonmano español demandaba. Una gran ‘campanada’ de la que este sábado el conjunto blaugrana se vengaba.
Una vez se puede sorprender a los blaugrana. Dos, parece prácticamente imposible. Con el factor relajación o confianza descartado ante la cercanía del último pinchazo, los de Pasqui no dieron opción a la escuadra alcarreña y se metieron en la final de la Copa Asobal por la vía rápida al imponerse por 36-22.
No tropieza dos veces en la misma piedra el FC Barcelona, que salió con la lección bien aprendida y ni siquiera dio opción a que el partido tuviera emoción o a que su rival pudiera creer en el milagro en su debut en este torneo, dejando visto para sentencia el choque en la primera mitad al arrasar ya de salida.
Y es que, en cinco minutos, Montes ya se veía obligado a pedir tiempo muerto porque su equipo perdía 3-0. Y sólo sería el inicio de la sangría. Gonzalo paraba, la defensa era el muro que Viran y Sorhaindo acostumbran a formar, a la contra los goles se sucedían y en ataque N’Guessan machacaba desde nueve metros.
¿La consecuencia? Era que la diferencia no dejara poco a poco de aumentar. 7-2 a los 10 minutos, 15-7 a los 20 e incluso una máxima de 12 (21-9) en el tramo final, antes de irse finalmente 21-10 a vestuarios.
Todo el ‘pescado estaba vendido’ pero al menos, para beneficio de los espectadores, el Guadalajara no bajó los brazos en la segunda mitad y siguió peleando hasta el final, si bien pese al recital de paradas de Eceolaza no pudo acercarse a menos de 9 goles y acabó cayendo por esos 14 de diferencia en la primera ocasión de todo el choque en la que el Barcelona los cogía.
Barcelona 36 - Guadalajara 22: 'Con la lección bien aprendida y sin lugar a la emoción'
El conjunto blaugrana no quiso dar opción a una nueva sorpresa del conjunto alcarreño y se metió en la final tras coger 12 goles de renta ya en la primera mitad
16/12/2017
Actualizado a
02/09/2019
Lo más leído