Arrancar la liga con victoria, fuera de casa es seguramente el sueño de cualquier equipo de fútbol. Pocos lo consiguen, pero puede presumir la Sociedad Deportiva Ponferradina de ser uno de ellos.Porque el conjunto berciano dio en Cartagena un golpe sobre la mesa, no exento del sufrimiento propio de cualquier punto en esta liga, que de un plumazo sirve para despejar cualquier duda que pudiera quedar de la pretemporada y confirmar que el equipo de José Gomes tiene un plan para dar guerra en la categoría.
Y es que hay muchas formas de ganar un partido de fútbol, reduciéndose la única verdad a que lo hace el que más goles marca. La Ponferradina se vistió de ese equipo que sabe esperar, aguantar las embestidas del rival y buscar como un caza la portería contraria cuando tiene la oportunidad de hacerlo. Uno de esos equipos que desesperan al aficionado del rival, harto de balón y sin goles, pero que son sinónimo de buenos resultados.
A los 7 minutos Lacerda dejaba su carta de presentación con un golazo en el que lució habilidades6 tiros tuvo la Ponferradina en Cartagonova, 1 se fue al palo, dos los detuvo Marc Martínez y los restantes fueron goles. Porque puso la directa la Deportiva en su primer partido de la temporada, siendo un equipo veloz y contundente en las transiciones y el contraataque, obviamente sin estar exenta su propuesta de sufrimiento.
Todo ello en un encuentro vibrante desde el primer minuto, en el que apunto estaba Yuri de enganchar un centro desde la izquierda en la primera jugada para que en la vuelta Amir sacase una mano espectacular para salvar un tiro de Calero desde fuera del área que iba a la escuadra. En el córner posterior, Mikel Rico mandaba alto su disparo en el área pequeña de forma casi inexplicable.
Sabía la Ponferradina que debería sufrir para poder tener su oportunidad y lo cierto es que no tardó en llegar. Los protagonistas, dos de los recién llegados, Nwakali y Lacerda, que junto a Diéguez y Moi Delgado fueron titulares. El mediocentro se inventó un sensacional pase de 30 metros a la espalda de la defensa que recogió el delantero, que luciendo cualidades físicas dejaba tirado a Pablo Vázquez para plantarse ante el portero y soltar un durísimo disparo que se colaba en la portería con ayuda del larguero.
Ganaba ya la Ponferradina a los 7 minutos, pero eso no hizo que cambiase un ápice ni el guión del partido ni la intensidad de ambos equipos. Un toma y daca continuo en el que el Cartagena mandaba, dominaba el centro del campo con Medina y Nwakali sufriendo sin balón y pisaba con continuidad el área de la Deportiva, viviendo sobre la cuerda cada vez que los bercianos robaban y miraban el campo rival. Eso sí, daba la sensación de que por cada contraataque que desperdiciaba el equipo de Gomes, el Cartagena tenía la opción de empatar.
Naranjo, poco acertado, regalaba un contragolpe y Ortuño a punto estaba de adelantarse a Amir para marcar. Lacerda no lograba convertir una nueva transición y Arribas remataba solo en el corazón del área. Lo cierto es que iba demasiado el cántaro a la fuente como para no terminar rompiéndose, algo que acabó ocurriendo a 10 minutos para el descanso.
Lo hizo Mikel Rico con el segundo golazo de la noche, lanzándose en plancha llegando desde atrás para adelantarse a Pascanu y conectar un duro cabezazo a centro del eléctrico De Blasis ante el que nada podía hacer Amir.
Así llegaría el encuentro al descanso, con la necesidad de bajar el acelerador si los jugadores querían llegar al final del partido teniendo en cuenta las alturas de temporada. Sin embargo, sabía la Deportiva por dónde pasaban sus opciones y eso, proponiéndolo desde el principio, también pasaba por sacar el balón jugado desde atrás.
Lo hizo a la perfección la Ponferradina por banda derecha primero, llevando el balón a la izquierda después para ir superando líneas y que finalmente fuese Naranjo el que cedía el balón atrás para que Dani Ojeda le quitase las telarañas a la escuadra de la portería del Cartagena con un derechazo marca de la casa que significaba el 1-2.
Dani Ojeda fue el ejecutor de la propuesta berciana con dos golazos que le convirtieron en el héroeNi 10 minutos tardaría en llegar el golpe que parecía definitivo, con un Cartagena ya volcado sobre el área rival a pesar de que aún le restaba media hora al partido. Salía en esta ocasión rápido la Deportiva pillando a la zaga local descolocada tras subir a rematar un córner y Yuri, con la precisión de un cirujano, dejaba a Dani Ojeda solo ante Marc Martínez para que con una fina vaselina pusiera un 1-3 que parecía sentenciar el encuentro.
Nada más lejos de la realidad, porque si acaso era posible el encuentro terminó de romperse. Tuvo varias la Deportiva para ya sí abrir una brecha definitiva en el marcador, pero el poste se interpuso en el campo de Sabit en su primer balón como jugador blanquiazul, Martínez salvó un mano a mano con Naranjo y Espiau no fue capaz de concretar una de las contras de las que dispuso el equipo.
Así las cosas, el marcador daba opciones para que el Cartagena creyera en la posibilidad de sacar algo del partido y un viejo conocido se encargó de alimentar las esperanzas. Porque Boja Valle continuó su idilio contra la Ponferradina y tras un córner hacía el 2-3 aún con 10 minutos por jugarse. Pedía perdón en su celebración el berciano, pero los fantasmas de lo ocurrido en Alcorcón la pasada campaña sobrevolaron al equipo blanquiazul, ayer amarillo.
Tuvo que sufrir hasta el final la Deportiva, con Amir a punto de liarla en una salida ante Sadiku que salvó Amo in extremis y con el propio delantero albano teniendo un disparo claro desde la frontal tras una dejada precisamente de Borja Valle.
Finalmente pitaba el colegiado el final, permitiendo a la Deportiva celebrar sus primeros tres puntos de la temporada, una victoria muy necesaria para asentar al equipo y seguir trabajando en lo que parece ser la línea correcta. La próxima semana, ya en El Toralín, el segundo acto.