Muchas veces los triunfadores de un deporte, el menos en la lucha, no son aquellos que levantan el trofeo de campeón. O, al menos, no lo son ellos solos.
Eso ocurrió ayer en Taranilla y en la categoría de medios. Hubo dos triunfadores, uno que ganó el corro, Samuel Sánchez; y otro que ganó el corazón de los aficionados, se llama José Luis García, le llaman Chelín, y es de Puente Almuhey, a tiro de pájaro del lugar donde se disputaba el corro ayer, en la pradera de Taranilla.
Era un combate muy importante. El más importante de la tarde para Chelín pues se medía al líder de medios y gran favorito, Adri el de Villavente. Y Chelín logró darle caída y media, la primera una preciosa cadrilada. Se agarraron y se produjo otra caída que los árbitros dieron como entera para él. Ganaba el combate. Ganaba al líder. Y José Luis, en su casa, se dirigió a los árbitros y les dijo que le dieran media a su rival que se había soltado.
Grande Chelín. Grande en Cerdeña y grandísimo en León. Nos alegró una tarde que se nos había estropeado un poco cuando se lesionó Gasi, esa alegría de la huerta fuera y dentro del corro, que te anima con una anécdota o con una cadrilada y me temo que lo hayamos perdido para una temporada. Que no sea larga.
Medios parecía abonado a las noticias. Lo fue Chelín, que después no remató al ‘estrellarse’ con una roca, el primo de Moisés La Roca, Samuel, del que todos esperaban que llegara este día y llegó. Había tenido la mala suerte de pasar por la lesión de Gasi pero solventó con suficiencia lo de Chelín y después tampoco le dio opciones a otro favorito al caer Adri, el otro Adri y el otro Fierro a la vez, Adrián Fierro. Completó la gesta Samuel, que algún día tenía que dejar de ser ‘el primo de La Roca’ para construir su propio camino, que lucha tiene para ello.
Pasó en ligeros que Víctor Llamazares, que también luchaba a unos metros de su casa, quiso aprovechar el primero de los pocos corros que le quedan antes de pasar por el quirófano (el día 24) y lo hizo a lo grande, como muchas veces hace él. Con poder y con lucha, ayer nada pudo hacer en la final ese gran luchador que es David Riaño pero es que cuando el de Valderrueda saca la lucha que lleva dentro es de los tipos con más arte y variedad sobre la hierba. «Cualquiera diría que lucha con medio brazo derecho», bromeaban Berto el de Prioro y Rubén el de Valbuena, que recordaban cuando se agarraron «aquí mismo» hace 40 años y echaban en falta la pasión que entonces había en la grada en Taranilla.
En semipesados sigue el monólogo Tomasín, su desgracia ya es la de los grandes, ganar no es ninguna noticia. Curiosamente ayer fue noticia que La Perla, ayer de Renedo de Valdetuéjar, logró al fin darle media caída y antes un golpe en la cabeza que retumbó la hierba. Pero para El Coronel Uco eso es un rasguño.
Pesados tenía noticias, ausencia y presencias. Ausentes estaban el ‘animador’ Unai y Víctor J., celebrando el oro de Cerdeña y un cumpleaños; y la presencia fue la de Davizuco, para probarse. Fue tercero pero se resintió de la rotura de fibras… por jugar al padel.
Así las cosas Pedro Alvarado se mostró en Tomasuco. No le hicieron sombra ayer a este Kamikaze que sigue creciendo como luchador… «Si asientas la cabeza, que se echen a temblar», le dicen. Él sonríe. Siempre sonríe. Aunque «dudo que cambie, soy así».