El Clínica Ponferrada sigue con la necesidad de volver a ganar tras otra derrota en los momentos finales ante Zornotza tras un partido que lideraron los bercianos en gran parte.
Ahora el reto parece más complicado, Huelva, que llega como 6º clasificado y que no hace tanto era 3º, pero en medio de un gran crisis institucional muy grave y con tres derrotas consecutivas. La primera medida del club andaluz fue despedir a su directo deportivo y al entrenador, Íñigo Núñez, con todo su ‘staff’, lo que dejó al equipo sin fisioterapeuta en el último encuentro y generó el enfado de una afición que gritó «directiva dimisión». Unos dirigentes que no se presentaron al partido ante la situación del equipo.
La siguiente medida fue contratar a Víctor Pontanilla, así como la salida y entrada de nuevas incorporaciones, entre ellas la de Raúl Timoner y tal y como ha anunciado el club «se han cerrado incorporaciones que serán anunciadas a través de los canales oficiales del club».
Una situación que perjudica al equipo y a la afición, tres derrotas consecutivas, en lo que puede ser una gran oportunidad para el Clínica Ponferrada de aprovecharse de la situación para volver a ganar.