Hace sólo ocho días, Juan Carlos Menudo lo veía todo gris. Era uno de los fichajes más destacados de la temporada y empezó de titular, pero tras dos malos primeros encuentros perdió el puesto e incluso en dos choques se quedó sin disputar ni un minuto. Sin embargo, cosas del fútbol y de los goleadores, en dos partidos todo ha cambiado. Frente al Unionistas salió desde el banquillo e hizo los dos goles de la remontada. Y este sábado, ante el Guijuelo, recuperó su posición de inicio y firmó un nuevo doblete que lideraba el triunfo.La racha de Menudo dispara a la Cultural, que volvió a mostrar una cara muy diferente ante su público de la que viene dejando fuera. Las dudas y problemas a domicilio se transforman en solvencia y claridad en el Reino, donde sumó su tercer triunfo consecutivo tras imponerse por 3-1 al Guijuelo en un partido que controlaron de principio a fin y en el que fueron muy superiores.
Si el líder Athletic B se llevó cinco goles y el gran favorito Burgos se fue con cuatro, la segunda mejor defensa de la liga hasta el momento se marchó con tres goles que pudieron ser bastantes más de haber tenido una mayor puntería los leoneses.
Menudo cazó en el segundo palo una acción con varios rebotes y dio premio al gran arranque de partido leonés Una nueva muestra de potencial en un partido en el que además sólo tardaron 24 minutos en abrir la lata. Porque tras un tiro desde la frontal de Luque, una mala salida de Vallejo que acababa reaccionando bien tras robarle Gudiño la cartera y un tiro del extremo argentino en el que pedían mano del defensa y cuyo rechace Dioni lo mandaba arriba en posición clara, por fin la Cultural acababa atinando con la portería rival con cierta dosis de fortuna.
Porque en una acción con varios rebotes, el último tras disparar Gudiño, el balón acababa quedando muerto en el segundo palo, donde llegaba el ‘más listo de la clase’, Menudo, para fusilar al meta y colocar el 1-0 en el marcador.
Un claro agarrón sobre Rodas cuando iba a rematar un córner se convirtió en un penalti que transformó Dioni Lo más difícil estaba hecho, pero los de Aira no se conformaron y volvieron a buscar el segundo, que acabaría llegando desde el punto de penalti. Sería tras un agarrón en un saque de esquina, una de esas jugadas que se ven cientos de veces pero que habitualmente no se pita, pero que en esta ocasión fue tan descarado y escandaloso, con el defensa colgándose de Rodas, que el árbitro no dudó en convertir en una pena máxima que Dioni transformaba tras engañar a Guille Vallejo.
El choque parecía encarrilado, pero en una acción aislada volvía a abrirse. Apenas había pisado el Guijuelo el área culturalista, pero en la primera llegada hizo el 2-1. Lo hizo su último fichaje, el debutante Sikorski, tras llegar el primero al rechace que Leandro dejaba ‘muerto’ en el área pequeña tras despejar hacia el centro un disparo desde la frontal.
Sikorski, en el rechace que Leandro dejaba centrado tras un tiro lejano, hacía el 2-1 en la primera llegada local El tanto salmantino dejó los únicos momentos de duda culturalista, unos últimos cinco minutos de primera mitad en los que el partido se niveló... si bien las aguas volverían a su cauce tras el paso por vestuarios.
Y es que a los 12 minutos, después de que una ‘palomita’ de Vallejo evitara que el tiro lejano de Menudo ampliara distancias, el sevillano se desquitaba y hacía el 3-1. Lo hacía tras un centro medido de Dani Pichín, que acababa de entrar al campo, y que cabeceaba en el segundo palo para firmar la sentencia.
Un gol para evitar dudas en el tramo final y con la firma de dos de los grandes protagonistas, pues si Menudo ha iniciado un idilio con el gol, Pichín cada día que pasa va a más, y fue desequilibrante desde su salida. Ambos salieron de extremos, demostrando que Aira tiene un bendito problema en esa posición con un Gudiño que volvió a dejar una gran sensación y un Kawaya que parece indiscutible cuando se recupere.
Aunque, si hay alguien que ha dado un paso adelante descomunal en las últimas semanas, ese es Alfonso, que cuajó su mejor partido con la Cultural, hartándose a robar balones y dándoles luego salida con criterio.
Pichín, que sigue yendo a más, puso un centro medido nada más salir que Menudo remató para sentenciar Ellos fueron las grandes claves de un encuentro que, tras el 3-1, acabó bajando de intensidad. Ni el Guijuelo llegó a creer realmente en la remontada, ni la Cultural buscó esta vez hacer sangre, si bien tuvo un par de ocasiones para haber ampliado aún más la diferencia.
Una fue de Dioni, que se hinchó a hacer kilómetros, a trabajar y a jugar de espaldas, pero estuvo muy desafortunado en su principal virtud, resolver dentro del área, y en esa acción final se quedaba solo ante Vallejo pero se dormía, el meta se le echaba encima y ni siquiera llegaba a disparar. ¿La otra? Del capitán Antonio Martínez, que entraba a siete para el final estrenándose y jugando sus primeros minutos de la temporada, y al que Benito de cabeza dejaba en bandeja un balón que dentro del área en posición clara enviaba arriba.
Hubiera sido la guinda a un partido que confirma el crecimiento de una Cultural que, tras sacar los últimos nueve puntos, ya está a sólo dos del liderato. Y con la sensación de ir a más.