Una lección de esfuerzo, de garra y de saber leer a la perfección lo que pedía el partido para demostrar que ellos también pueden ser importantes en la Cultural y meter dudas en la cabeza de Aira de cara a futuros compromisos.Es lo que dejaron este jueves los menos habituales de la escuadra blanca, que mostraron una sensacional imagen y lograron el pase a la segunda ronda de la Copa del Rey, pues golearon 3-0 a Las Rozas en un partido marcado por la climatología y en el que los leoneses sufrieron hasta abrir la lata en el tramo final de la primera mitad, pero fueron muy superiores a partir de ahí.
‘Como pez en el agua’ sigue sintiéndose en el Reino la Cultural, que sumó su octavo triunfo como local bajo el diluvio que les azotó desde el minuto uno al 90, convirtiendo en una piscina algunas zonas de un campo que aguantó de forma envidiable para la que cayó.
Con un panorama así, las ganas y la seriedad eran fundamentales. Y de ellas fue sobrada la Cultural, donde muchos jugadores dieron un paso adelante. ¿Entre ellos? Un Sergio Benito protagonista en el primer y el segundo gol.
Benito se quedó dos veces ante el meta. En el 1-0 forzó un penalti que él convirtió; y en el 2-0 tiró al palo y Augusto marcó el rechaceAbrió la lata el madrileño cuando peor pintaban las cosas, tras una media hora en la que los leoneses no lograban hacerse con el dominio del choque y era Las Rozas, favorecido eso sí por atacar en la mitad en la que mejor estaba el césped, quien lograba combinar aunque sin generar ocasiones.
Sin embargo, a la primera que tuvo la Cultural acertó. Fue en un balón largo que despejaba mal un defensa, evitando el fuera de juego en el que sino hubiera estado Sergio Benito, y dejándole solo ante el meta, que le derribaba claramente tras regatearle. Penalti, y con el cambio de norma de hace ya dos años sólo amarilla, que el propio delantero se encargaba de transformar, golpeando al balón fuerte y al centro mientras el portero se vencía a un lado.
Volvía a ver puerta un Sergio Benito que tenía un papel capital en el 2-0 que hacía otro de los más destacados, un Augusto que apenas había tenido continuidad y dejó grandes detalles, y ya en la última jugada de la primera mitad había rozado el tanto al controlar un pase atrás solo en el punto de penalti pero írsele el tiro desviado.
No falló a la segunda, que llegó a los nueve minutos de la reanudación cuando un pase largo de Aitor (inconmensurable como toda la zaga) sorprendía a la defensa y dejaba a Benito mano a mano ante el meta, superándole pero dando su disparo en el palo, y quedándole el rechace a un Augusto que, con sangre fría, controlaba y la ponía a media altura.
Quienes no marcaron, pero también brillaron, fue un Montes de nuevo inmenso en labores de contención, un Antonio que se hinchó a trabajar en el mediocampo y un Dani Pichín desequilibrante y que rozó el gol en dos voleas, una de las cuales se encontraba con la ‘palomita’ del meta y otra se iba por milímetros a la derecha.
Y es que la sentencia llegaría a balón parado. Había rozado ya el tercero tras un saque de esquina un Virgil serio en su vuelta al equipo, y en otro córner, éste sacado en corto hacia Antonio, llegaba el cabezazo de Castañeda para redondear una goleada en cuyo tramo final reaparecía Iván González y que llegaba con portería a cero gracias a una gran postrera intervención de Leandro.