La pasada temporada Rodri Suárez partía con el rol de cuarto central en la Cultural, pero acabó haciéndose con el puesto gracias al sensacional rendimiento mostrado cuando las lesiones de Guitián y Coch le permitieron tener una oportunidad que aprovechó.
Sin embargo, en esta ocasión será diferente. Desde la escuadra culturalista le han dejado claro que cuentan con él para que sea como este año una de las indiscutibles referencias del centro de la defensa, queriendo que sea un líder del vestuario también en el apartado anímico y emocional.
Además del renovado Fornos, con el que Rodri formó una gran pareja el año pasado, tendrá como gran competencia por el puesto a un central zurdo que busca la dirección deportiva para dar mayor fluidez a la salida de balón y a un jugador sub’23 de perfil teóricamente más bajo con el que completar el puesto.
No estarán por tanto ni mucho menos baratos los minutos, pero la confianza del club en el jugador es máxima, hasta el punto de que ya le han planteado sentarse para cambiar su contrato.
Junto a Rodri y Fornos, la Cultural busca un central zurdo que ayude en la salida de balón y otro sub’23
Y es que la idea de la Cultural es mejorar el contrato de Rodri, a quien renovaron el verano pasado cuando su rol iba a ser el de cuarto central, buscando a la vez ampliarlo aún más, pues aunque le quedan dos años más (firmó hasta 2026) la idea es convertirle en uno de los buques insignia del club y asegurarse su continuidad a largo plazo.
No obstante, lo que tiene asegurado la escuadra culturalista es estar a salvo de posibles intereses por el central, cuya buena temporada no ha pasado desapercibida en equipos de categoría superior, que han mostrado su interés aunque sin llegar en ningún momento ofertas en firme al club.
Pero aunque llegaran, salvo que fuera una cantidad desorbitada que parezca imposible que nadie lleve a cabo, la Cultural no se plantea ninguna negociación, sabiendo que todo está en sus manos pues el jugador tiene una cláusula de un millón de euros.
La Cultural no se plantea entrar en ninguna negociación por el central salvo que fuera una oferta desorbitada
Le salió bien al conjunto culturalista la apuesta hecha el verano pasado, cuando tras entrar y llegar a disputar 15 partidos con el primer equipo en la campaña 2021/22, Docampo no contaba con él y no le dio ni un solo minuto, debiendo salir cedido en Navidad a un Avilés donde tampoco consiguió hacerse imprescindible.
Pese a ello la Cultural buscó y cerró esa renovación que, tras ser este año el tercer jugador que más minutos ha disputado en los leoneses, con 28 titularidades, le permite ahora estar tranquila con una de las piezas claves de su proyecto.