De la Barrera: "La victoria es un premio justísimo y nos va a espolear en lo anímico"

El Miniestadi sigue siendo mágico para la Cultural. Si el pasado mes de mayo los leoneses dieron el primer zarpazo hacia el ascenso, ayer se impusieron en una final por la permanencia consiguiendo tres puntos que suponen un balón de oxígeno en la tabla, pero también a nivel moral. «La victoria es un premio justísimo y nos va a espolear en lo anímico», aseguró el técnico, Rubén de la Barrera.

Y es que para el gallego el conjunto culturalista venía haciendo bien las cosas en las últimas semanas, pero se estaba viendo penalizada por su falta de acierto en ambas áreas, algo que logró cambiar ante el filial azulgrana. «La diferencia respecto a otros partidos ha estado en la fortuna y el acierto. Si hubiéramos estado más acertados llevaríamos muchos más puntos, no sé donde estaríamos, pero donde estamos ahora seguro que no», confesó el técnico, que espera que el triunfo sirva para «evolucionar y construir un futuro mejor».

También por la forma de lograrlo. Con un hombre menos durante una hora, para De la Barrera el equipo demostró «estar más vivo y unido que nunca». «Estoy muy orgulloso de que con diez y las dificultades que tenemos en la clasificación, los jugadores se hayan multiplicado para ganar en un campo muy difícil», apostilló.

La victoria supone además que la Cultural gana el ‘goal average’ particular al Barça B, un factor que considera «importantísimo» en una competición tan imprevisible como la Segunda División. «Nunca sabes cómo va a ir la clasificación. Da muchas vueltas: te acercas, sales, te alejas… Sabemos que nos tenemos que disfrazar de equipo que va a sufrir, pero esperamos cumplir el objetivo», destacó el técnico, que insistió en la buena imagen que el equipo está dejando en su regreso a la división de plata tras cuarenta años de ausencia. «Por fútbol, nos lo merecemos», sentenció.

El gallego eludió hablar de los árbitros, aunque aseguró no entender la razón de la expulsión del segundo entrenador, Abel Mourelo, pero espera que el triunfo sea un «punto de inflexión». «Ahora toca centrarse en el Tenerife y seguir luchando. El único objetivo es ganar», concluyó.