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Decidió un gravísimo error de un veterano como Laure en el arranque de la segunda mitad, que dio alas a una Deportiva que había sufrido en los compases iniciales del choque y no conseguía hacerse con el dominio pese a mejorar e igualar el panorama.
Sin embargo en una acción aislada el defensor del Alcorcón se complicaba la vida en vez de despejar, acababa perdiendo el balón ante un Naranjo más listo que nadie y para colmo se tiraba en plancha a trabar al extremo berciano, derribándole y cometiendo un penalti que traía además consigo su expulsión.
Buen debut de Amir, con dos grandes intervenciones en la primera mitad. El centro del campo berciano, superado Era el minuto 48 y la Deportiva no sólo se aseguraba jugar contra diez prácticamente toda la segunda mitad, sino que además se adelantaba el marcador porque Yuri no fallaba, engañaba al portero y le batía con un tiro hacia la derecha que hacía rugir a los cerca de 3.000 espectadores que año y medio después volvían en liga al Toralín.
Se le ponía de cara a la escuadra berciana un partido en el que en la primera parte les había sostenido su meta Amir, que tuvo una puesta en escena sobresaliente, y que hizo dos grandes intervenciones a Xisco, la primera al volar para sacarle con un paradón un cabezazo que iba dentro y la segunda para tocar lo justo su intento de vaselina.
Sin embargo, tocó tener incertidumbre hasta el final, porque aún con un hombre más el centro del campo se vio superado con un Alcorcón que fue volviendo a dominar de nuevo con el paso de los minutos, si bien la defensa liderada por un extraordinario Amo resistió bien y las mejores ocasiones fueron de los bercianos a la contra.
El Alcorcón presionó en el tramo final, pero Ojeda tuvo dos claras ocasiones para haber sentenciado Fueron ambas de Dani Ojeda, la más clara solo ante un portero que despejaba el balón que a punto estaba de meter Yuri de chilena en el rechace, y la segunda en un contraataque que no podía convertirse en sentencia al acabar sacando un defensa, y que hacía que hasta el final, más con centros y sensación de miedo por estar el balón en el área que por crear oportunidades, sobrevalorara el posible empate que no llegó, por lo que los bercianos se anotaron sus primeros tres puntos.
Con lo justo, pero hubo un regreso feliz. Eso es lo que cuenta. Y ganar esos partidos en los que quizá no lo merezcas, lo que a final de temporada acaba sirviendo para cumplir el objetivo.