Casi once meses de competición desembocan en el día de hoy. La Deportiva recibe este sábado (19:30 horas) al Hércules en el partido que dictaminará si finalmente son los bercianos o los alicantinos los que el próximo curso disfrutan de una división de plata que promete emociones fuertes.
Si bien la Ponferradina dio un paso de gigante con otra victoria histórica en el Rico Pérez –Isi se convirtió en el sucesor espiritual de Fran con dos obras de artes que silenciaron el estadio–, tanto la plantilla como el cuerpo técnico son conscientes de que su rival está tocado, pero no hundido y que para lograr el tan ansiado regreso a Segunda División tocará ponerse el mono de trabajo una última vez.
La mensaje ha sido unánime. Para llegar al cielo quedan 90 minutos de infierno. Si bien el resultado de la ida (1-3) supone una renta inimaginable cuando empezó la eliminatoria, el Hércules llega al Toralín sin nada que perder y mucho que ganar, una falta de presión que puede jugar a su favor.
De hecho, pese a la superioridad de la Deportiva durante todo el choque del pasado domingo, los de Lluís Planagumà contaron con varias ocasiones que pudieron haberle dado la vuelta a la tortilla, como el mano a mano de Benja todavía con el 0-1 en el marcador o un par de remates en el interior del área al comienzo de la segunda mitad que hubieran vuelto a meter a los locales en el choque.
Para evitar la ‘resurrección’ herculana, Bolo seguirá apostando por la continuidad y evitará experimentos. Ni siquiera la grave lesión de Jon García, líder de la zaga durante el ‘playoff’, ha desestabilizado a un bloque que juega de memoria y que ha llegado al tramo decisivo del curso en un momento muy dulce.
Así, sin sancionados y con toda la plantilla a su disposición a excepción del central, el técnico blanquiazul repetirá el once que la afición berciana ya se sabe de memoria, con Manu García en la portería, Trigueros y Zabaco en el eje de la zaga con Son y Ríos Reina en los laterales; Sielva y Larrea en la sala de máquinas, Pichín e Isi en las bandas y Bravo y Kaxe como referentes ofensivos.
Y es que el planteamiento de la Deportiva brilla con espacios y ante un rival con la obligación no solo de ganar, sino de golear, los visitantes tendrán que asumir riesgos desde el primer minuto, el escenario ideal para que Isi y compañía pongan el broche de oro a una temporada inolvidable.
Por su parte, el Hércules no ha perdido la fe en un ascenso que se ha puesto muy cuesta arriba tras el duelo del Rico Pérez, pero que siguen viendo alcanzable. El propio entrenador herculano aseguró el pasado jueves que «tenemos muchos motivos para creer» y ve a su equipo capacitado para «hacer historia».
Pese al varapalo del pasado domingo, Planagumà podría apostar por un once muy similar al del partido del Rico Pérez, una propuesta que ha repetido con buenos resultados durante toda la fase de ascenso y que únicamente tropezó ante la propia Deportiva.
Deportiva - Hércules: 'El último escalón hacia el cielo'
Tras conquistar el Rico Pérez, la Deportiva recibe este sábado al Hércules (19:30 horas) con el ascenso bien encarrilado pero consciente de que todavía queda un duelo muy duro
28/06/2019
Actualizado a
19/09/2019
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