A pesar de aquel imprevisto y de la derrota ante los manchegos (2-0), el partido marcó un antes y un después. «Fue un paso muy grande en el crecimiento del club, una alegría deportiva irrepetible para la ciudad. Se sentaron las bases de lo que hoy es el club». Rubén Vega, ha vivido la ‘metamorfosis’ de la Ponferradina en la última década, primero como futbolista -formó parte del primer once berciano en Segunda- y después como parte del cuerpo técnico. «Ese partido y esa temporada pusieron Ponferrada en el mapa futbolístico, dejó de ser un equipo humilde y desconocido para tener una identidad propia», explica el de Castrillo de las Piedras.
Muestra de lo que ha cambiado el club en diez años es que lo que entonces se vivió como una gesta casi irrepetible, ahora es una obligación. «Era todo ilusión, todo positivismo y no había la presión que hay ahora, el club ha crecido y el objetivo es estar en Segunda», asegura.
La Ponferradina no ha podido celebrar el aniversario en la división de plata, ni ha empezado con buen pie la Liga, pero Vega recuerda que se ha confeccionado una plantilla pensada para «volver cuanto antes» a Segunda División, un objetivo por el que se «va a luchar hasta el final». «Queremos el primer puesto, el ascenso sería más fácil», agrega.
Aunque días como el 25 de Junio o el 27 de agosto de 2006 permanecerán siempre en el recuerdo, el de Castrillo apuesta por «vivir el presente» para volver hacer realidad lo que antes solo era un sueño. Solo queda uno, el más difícil todavía, un ascenso a Primera División. ¿Se vivirá la próxima década otro salto ‘imposible’?
Diez años matando gigantes
La Deportiva se ha ganado a pulso el respeto del fútbol español. Durante las cuatro últimas temporadas en Segunda División, muchos han sido las víctimas que se ha cobrado El Toralín. Con victorias ante ‘grandes’ como Betis, Mallorca o Real Zaragoza, con el que los blanquiazules mantuvieron un pulso interminable por el ‘playoff’ hace solo dos temporadas, se ganó el respeto de la categoría.
También fuera de casa se lograron grandes gestas. ¿La más sonada? La goleada en Riazor (0-3) ante un Deportivo que conseguiría el ascenso directo en la temporada 2013/2014 y que allanó el camino a la permanencia.