En Kona, la ciudad más del archipiélago y conocida en el mundo del deporte por su tradición de Ironman, Pedro ha sido el primer leonés en competir en la considerada ‘cuna’ de este deporte que exige una preparación física impresionante, deporte ‘extremo’ para muchos por los 3,8 kilómetros que se debe nadar, los 180 en bicicleta y, por último, la maratón que pone a prueba a los hombres y mujeres más duros del mundo, entre ellos al que se conoce en ambientes como «hombre de hierro leonés».
Las casi 10 horas y 30 minutos que tardó en cruzar la línea de meta –aireando una bandera de España y luciendo una impresionante sonrisa por haber alcanzado este logro–, y siempre bajo condiciones climatológicas extremas, han sido suficientes para que Pedro Cuevas demostrara ante los mejores del mundo que está en forma para hacer frente a pruebas de dureza extrema. Tan en forma como para afrontar los casi 4 kilómetros nadando en los que empleó 1 hora y 9 minutos, las 5 horas, 25 minutos, 40 segundos que le llevó recorrer 180 kilómetros a bordo de su Argon 18 y las 3 horas, 41 minutos, 27 segundos necesarios para hacer la maratón (42 kilómetros).