Nada ha cambiado respecto a la situación de Ernesto Gómez. Ya en verano, la Ponferradina intentó negociar con él la rescisión de su contrato, pero el extremo andaluz se mantuvo firme en su intención de continuar vistiendo los colores blanquiazules. Y ahora, en el mercado de invierno, ambas posturas siguen iguales: el club pretende darle salida pero el jugador desea cumplir el medio año que le queda de vinculación.
Así se lo reiteró este martes -mediante su agente- a la Deportiva, según fuentes cercanas al propio representante. Ernesto cuenta con ofertas de otros clubes de la categoría, como por ejemplo del Antequera, el líder del grupo segundo de la Primera Federación, pero quiere seguir en Ponferrada pese a que su protagonismo en la primera vuelta ha sido residual (es el tercer extremo derecho por detrás de Bustos y Yeray y desde septiembre sólo ha sido titular en un partido liguero).
Por su parte, la entidad del Bierzo intenta liberar alguna ficha sénior para poder fichar a lo largo de este mes. Después de que Borja Fernández firmara una tregua (al menos temporal) con Javi Rey, todos los focos apuntaron hacia el '7', que no quiere moverse. De mantener este deseo hasta final de mercado, al club le quedarían dos opciones: o despedirlo unilateralmente con una compensación que quiere evitar pagar o resignarse a que continúe formando parte de plantilla y, entonces, pasar a intentar dar otra baja. En este último supuesto, Brais Abelenda tendría muchos números para convertirse en el protagonista del siguiente 'tira y afloja', aunque esto también podría producirse aunque Ernesto terminara saliendo. No obstante, la Ponferradina todavía tendría la baza de recuperar la licencia de Nacho Castillo, si bien sólo lo haría como último recurso.
Álvaro Romero, en pausa
¿Y por qué esta prisa para liberar una ficha? Porque la Deportiva tiene en pausa la operación Álvaro Romero. La Cadena SER en Tenerife adelantó un interés en el extremo sevillano que La Nueva Crónica ha podido confirmar. La escuadra isleña tiene la urgencia de rescindir su contrato para poder inscribir a Fabio, su último fichaje, y en las oficinas de El Toralín es un jugador que enamora y que quieren incorporar. Eso sí, la competencia es feroz: Hércules, Nàstic de Tarragona, Antequera, Real Murcia o Zamora han tanteado su situación, por lo que la Ponferradina teme que la tardanza en hacerle hueco pueda romper una operación en la que se ha postulado con firmeza.
En tres temporadas en el Algeciras en la tercera categoría del fútbol español, Romero registró unas sensacionales cifras de 29 goles y 11 asistencias, las cuales le hicieron saltar de categoría hacia Tenerife. No obstante, problemas de ligamentos en la rodilla truncaron la progresión fulgurante de un jugador que se desenvuelve tanto en las bandas como de media punta.
Fichaje de un delantero
El extremo sevillano no es el único caso abierto en el capítulo de entradas. Como ya comentó este periódico hace días, existe intención de incorporar un delantero, aunque en estos momentos las opciones son reducidas. La idea de ceder a Oliver Jürgens liberaría una licencia... sub23, por lo que el mercado de la Deportiva se reduce a atacantes de menos de esa edad.
Se tanteó el nombre de Alan Godoy, que no vio con buenos ojos recalar en el Bierzo, pues tiene sobre la mesa las opciones de Hércules, Baça Atlètic o Real Madrid Castilla que valora de mejor manera; y también el de Slavy, que reunió los intereses del propio filial merengue, Lugo o Villarreal B, y ha terminado firmando por el último una vez el Éibar le ha abierto la puerta. En este sentido, el Castilla está en el mercado incluso dispuesto a pagar un traspaso por un ariete que pueda complementar a Gonzalo García, el máximo anotador del grupo II.
En definitiva, el presente será un mercado largo y complicado para la Deportiva. Aunque no se esperan demasiados movimientos, las trabas para conseguir los deseados, ahora mismo, son múltiples. Es obligado pensar primero en las salidas y después dar paso a la carpeta de las incorporaciones. Hará falta paciencia en El Toralín.