El central de la Cultural, Fornos, aseguraba tras el encuentro en Tarragona que estaba «muy contento por una victoria en este campo en el que no había ganado nadie desde hace muchísimos meses. Nos da mucha vida y alegría, el vestuario está en éxtasis total, tenemos que celebrarlo porque nos lo merecemos pero con la cabeza fría y los pies en el suelo».
«Veníamos de una derrota en casa y queríamos cambiar eso lo antes posible, sabíamos que veníamos a un campo muy difícil y que teníamos bajas, pero se ve que todo el mundo aporta, que el que entra después rinde igual que está en el campo. Es un mérito enorme y una barbaridad lo que trabaja este equipo todos los días», añadía el zaguero, que cree que los cinco minutos en los que se pasó del 0-2 al 2-2 fueron «un cúmulo de errores e infortunios y que ellos también apretan, pero supimos mantenernos en el partido, el equipo no se vino abajo en ningún momento, supo remar y al final tuvo beneficio».