Jugó para golear, ganó con susto final

La Cultural le da un baño al Zamora en su mejor partido de la campaña y gana 1-0 pese a ‘perdonar’ 8 claras ocasiones / Los zamoranos tuvieron sus dos únicas llegadas en el 93

Jesús Coca Aguilera
04/01/2015
 Actualizado a 29/06/2019
Durante 92 minutos, la Cultural rozó la perfección. Generó nueve clarísimas ocasiones y le dio un baño en toda regla al Zamora, que se pasó el choque viéndolas venir y no tiró ni una sola vez entre los tres palos. Poco más se podía hacer ya no para ganar, sino para golear. Y sin embargo, la victoria acabó llegando, pero después de un tremendo susto final. Porque en el 93, en el último instante del descuento, llegaron las dos únicas llegadas zamoranas con peligro del choque.

Por fortuna, ninguna de ellas acabó en gol. En una el disparo de Salva Rivas, al que le quedaba el esférico absolutamente solo centrado y dentro del área grande, iba al medio y lo blocaba bien un seguro Leandro; y en la otra el de Arkaitz tras irse por velocidad de Tejedor y plantarse ante el meta aunque escorado, se marchaba demasiado cruzado cerca del poste derecho.

No hubiera sido justo. Aunque, por otro lado, hubiera sido muy típico de la Cultural. Pero no movieron el marcador, que acabó reflejando el 1-0 que permitía a los leoneses llevarse los tres puntos sumando su tercera victoria de los últimos cuatro partidos y colocándose a sólo dos puntos del quinto puesto que da acceso a Copa del Rey y a cinco del ‘playoff’ de ascenso.

Pérez marcó el único gol tras un córner en el que salió mal el meta Cantero, espectacular y salvador el resto del choque Acabó valiendo el gol de Pérez, el único de los muchísimos disparos claros culturalistas que acabó en las redes. Y fue, probablemente, en la oportunidad que menos pinta tenía de acabar así. De hecho, al final acabó siendo a balón parado como marcó su único tanto la Cultural. En un córner forzado por Tornero, desconocido por lo espectacular ayer de su actuación, Rubén García la colgaba, el meta Cantero salía ‘a por uvas’ al primer palo y un defensa la rozaba peinándola hacia atrás, donde el central culturalista recibía sin rivales cerca, controlaba y marcaba a puerta vacía.

Era el minuto 61, justo cuando tras una primera mitad de monólogo leonés y un arranque fulgurante con otras dos ocasiones nada más arrancar la segunda parte, el ‘vendaval’ culturalista había empezado a menguar. Sin embargo, le salió caro al Zamora el error de su portero, en el único borrón que puso a una tarde espectacular en que enlazó ‘paradón’ tras ‘paradón’ y mantuvo con vida a un equipo ramplón que tuvo un agujero negro en el centro del campo.

De hecho, antes de cumplirse los 30 segundos de juego, ya había tenido la primera oportunidad clara la Cultural. Fue tras una internada de Tornero por la derecha, que ponía un centro que Borja podía rematar franco en el segundo palo pero resbalaba en la zona helada del Reino, volviéndole el balón al interior para que la pusiera de nuevo y rematando esta vez Peláez a bocajarro tras controlar pero cruzándola demasiado.

Rubén García estuvo imperial en el centro del campo,Peláez brilló y Tornero jugó su mejor partido como culturalista No acertó el mediapunta con el gol, pero fue lo único que le faltó. Volvió a mostrar su mejor versión, con varios pases mágicos sacados de la nada y la sensación de peligro cada vez que el balón llegaba a sus botas cerca del área rival. No obstante, no quiere decir eso que fuera el mejor, porque ése título lo debería ostentar un Rubén García imperial en el centro del campo, donde mientras le duró la gasolina manejó el partido a su antojo. Brilló el gallego en un choque en que, no obstante, pocos no destacaron. Estuvieron sólidos y sin errores defensa y portería, cumplió Kamal, destacó unAketxe siempre luchador y que sólo tuvo la mala fortuna de encontrarse con el sensacional Cantero... Quizá excepto un Borja desaparecido y un Coutado que volvió a desaprovechar su oportunidad al salir por él, pasando inadvertido, todos rindieron cerca de su mejor nivel de la campaña.

Ello explica el aluvión de llegadas. Antes del descanso, hubo otras dos muy claras. Una de Kamal, al que Peláez dejaba con un pase entre los dos defensas solo ante el portero, al que superaba con un tiro cruzado que no llevaba demasiada potencia y conseguía sacar un defensa bajo palos. ¿La otra? De Aketxe, que tras un centro de Iván González remataba fuerte a tres metros de la línea de gol pero aunque iba pegada al palo Cantero daba una exhibición de reflejos para sacar una mano que evitaba el tanto del conjunto leonés, que no cesaba en su ímpetu con el parón.

De hecho, tras el paso por vestuarios y antes del tanto, Tejedor se sacaba un disparo que obligaba a otra exhibición del meta; y Peláez enviaba al lateral de la red un disparo en que ya se cantaba el gol que llegaría 10 minutos después.

En su acoso la Cultural estrelló un balón en el larguero, le sacaron otro bajo palos, le hicieron cuatro ‘paradones’... ¿Con 1-0? La Cultural se iba algo más atrás, pero las oportunidades para sentenciar continuaban llegando. Un disparo desde la frontal de Peláez que iba abajo, fuerte y pegado al palo donde aparecía de la nada la mano de Cantero; una internada de Iván González hasta la cocina cuyo ‘trallazo’ se encontraba con la palomita del portero; y, por último, un centro de un Tejedor de nuevo sobresaliente en una posición que no es la suya que Aketxe cabeceaba cruzando el balón pero estrellaba en el larguero.

Parecía imposible viendo el choque, pero éste llegó abierto al final. Y casi hace un cambio drástico de rumbo a última hora. Como no fue así, las sensaciones son inmejorables. La pitada de hace un mes contra el Lealtad parece lejanísima en el tiempo. Y la semana que viene llega el penúltimo, el Tropezón, para seguir creciendo. De momento, ya se mira para arriba...
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