Y es que ni la dirección deportiva ni el cuerpo técnico quieren que se produzca un ‘overbooking’ en la delantera.
En este momento, Manolo Díaz cuenta con cuatro puntas; el propio Sobrino, Yuri, Berrocal y Jebor, por lo que si el fichaje del canterano madridista por parte del Manchester City se enquista y teniendo en cuenta que en el debut liguero el madrileño apostó por Melero para la mediapunta, la Deportiva contaría con hasta cinco futbolistas para un único puesto.
Mientras se resuelve el ‘culebrón’ del verano, a los despachos siguen llegando ofrecimientos. Uno de los últimos en ponerse a tiro ha sido Riki, un clásico de Primera División que se encuentra sin equipo tras ser despedido por el Granada el pasado mes de julio. Según publicó ayer Ideal, el delantero está entrenando en solitario junto a un preparador físico en Madrid a mientras decide su nuevo destino.
Miquel espera una solución
A pesar de que Sobrino podría estar viviendo sus últimos días como blanquiazul, al delantero no le falta el apoyo de sus compañeros. El último en solidarizarse con el ariete ha sido Ignasi Miquel, que espera su situación se resuelva lo antes posible. «Es un momento difícil, cuando estas así lo único que quieres es que tu futuro se aclare. Ahora mismo está en un punto que no sabe qué esta pasando y eso es duro para él», explica el central, que fue titular en el debut liguero.
De cara al choque del Mallorca, Miquel espera un partido «complicado», aunque es optimista tras dejar la portería a cero ante el Elche. «Defender bien va a hacer que ganemos muchos puntos porque arriba hay gente que marca con facilidad», asegura.