La pesadilla de Rubén García continúa

No están siendo fáciles los últimos dos meses para Rubén García, que ha encadenado lesiones musculares que han provocado que sólo haya podido jugar 72 minutos en dos partidos durante estas últimas ocho semanas.

Una notable baja para la Cultural, que actúa sin su ‘cerebro’ en el centro del campo, un jugador que estando bien es imprescindible para Javier Cabello; y un palo para el jugador, que cuando parecía que por fin estaba saliendo del hoyo da otro paso hacia atrás.

Tras jugar el partido completo frente al Compostela el 18 de enero, Rubén García se había perdido cinco encuentros, volviendo con cinco minutos frente al Coruxo y saliendo de inicio ante las numerosas bajas pese a aún no estar al 100% frente al Guijuelo. Pero, en el calentamiento del pasado domingo con el Valladolid B, volvía a recaer.

¿El diagnóstico? Una tendinitis en el isquiotibial... ahora de la otra pierna, la de apoyo, la derecha, aunque el jugador está convencido de que tiene relación con la dolencia anterior. «Está algo inflamado el tendón y creo que es por intentar protegerme, por forzar y no intentar dañar la otra pierna se me ha hecho», señala RubénGarcía, que deja claro que «no hay ni rotura ni nada, pero está todo inflamado y es lo que me causa que me de pinchacitos y calambres».

Nuevos problemas que comenzaron antes del partido del Valladolid B, «ya había hablado con el mister y le había dicho que tenía una ligera molestia», y que se acentuaron cuando «calentando noté como un pinchacito en el tendón»; lo que hizo que desde el banquillo forzara en la segunda parte su quinta amarilla para intentar ‘limpiarse’ de tarjetas mientras se recuperaba.

Un proceso de recuperación que no debería ser largo... pero en el que tiene claro que no va a acelerar antes de tiempo. «Esta semana como estoy sancionado haré ejercicios y trabajo progresivo,pero espero estar la semana que viene. Eso sí, tengo claro que no me quiero precipitar, porque igual arriesgas y luego es peor...».

¿Volvió antes de tiempo también la semana pasada con el Guijuelo? «Igual sí fue un poco precipitado, pero por las circunstancias del otro día decidí jugar y ahora no es cuestión de darle ya más vueltas».

No obstante, ya se encuentra mejor físicamente... y sobre todo de ánimos, después de hundirse un poco al ver que se había vuelto a lesionar: «No es fácil, porque nunca he tenido nada muscular y ahora se han juntado dos seguidas, por lo que el domingo pasé muy mala noche y apenas dormí, y el lunes también estaba mal, pero ya estoy mejor».