La Ponferradina de la pasada campaña no se podía entender sin grandes nombres que se ganaron en el terreno de juego la confianza plena del por entonces entrenador, Jon Pérez Bolo, y de la parroquia berciana. Amir Abedzadeh en la portería; Paris Adot, José María Amo y Alexandru Pascanu en la defensa; Agus Medina y Erik Morán en el centro del campo; y Dani Ojeda, José Naranjo, Yuri de Souza y Edu Espiau en la parcela ofensiva se convirtieron en actores imprescindibles para que la Deportiva se quedara a las puertas de la fase de ascenso en una temporada de ensueño. No obstante, el rendimiento de la mayoría de ellos ha disminuido en lo que va del presente curso, un hecho que requiere de una solución temprana para que la entidad berciana retome el vuelo.
En primer lugar, Amir tardó escasas semanas en meterse a la afición en el bolsillo. Se trataba de un guardameta ciertamente desconocido que tenía como misión reemplazar –e incluso mejorar- a José Antonio Caro, y lo cumplió con creces durante la primera vuelta. Para el recuerdo quedan formidables actuaciones, como la victoria en Ipurúa, con grandes paradas que se transformaron en puntos. Sin embargo, después de una segunda vuelta más dubitativa en la que también acusó el cansancio por los desplazamientos con la selección de Irán, todavía no ha logrado recuperar aquel gran nivel exhibido en su competencia particular con Makaridze. Partidos flojos del iraní entregaron hasta en dos ocasiones la portería al exjugador del Almería, quien peleará durante el Mundial por quedarse con ella de forma definitiva.
En la zaga, Paris Adot y Alexandru Pascanu eran, de igual forma, dos de las piedras angulares del engranaje blanquiazul. Ambos titulares indiscutibles, cuajaron una campaña de notable alto con 37 partidos a la espalda de cada uno, lo que les sirvió para renovar sus contratos, en el caso del rumano de forma amplia. Tras la marcha de Iván Rodríguez, el reemplazo de Paris, llegó Aldair Neves, cuyo nivel no está siendo el esperado y no es capaz de ofrecer una rotación al navarro, el cual está acusando la fatiga de una forma notoria. No hay ni rastro de ese lateral incombustible. En el caso de Pascanu, la sociedad con Copete fue sensacional, pero en los últimos meses, al lado de Diéguez o Amo, está cometiendo más errores de la cuenta. Precisamente éste último, José María Amo, asumió un papel de mayor protagonismo respecto al curso previo con solidez y confianza, pero con el paso de las jornadas ha quedado señalado en gran parte de los goles encajados por la Deportiva.
En el centro del campo seguramente se encuentren otros dos de los bajones de rendimiento más palpables, Agus Medina y, sobre todo, Erik Morán. Si bien es cierto que ambos iniciaron la campaña con problemas físicos, no están siendo capaces de recuperar plenamente las sensaciones y manejar los partidos como sí conseguían hace meses. Excesivas pérdidas de balón, precipitación, mala colocación, gasolina justa y, además, mala compenetracióncon Kelechi Nwakali, el fichaje estrella. En los últimos días, Medina sí ha dejado rastro de unos mínimos brotes verdes que auguran una posible evolución, camino que debe seguir Morán para reafirmarse nuevamente como un futbolista capital.
Para terminar, en el capítulo ofensivo, Dani Ojeda fue el hombre más destacado en las primeras jornadas de José Gomes con cuatro goles en ocho partidos, pero sus últimas actuaciones se han alejado del canario consistente y regular de antes. Una cualidad completamente distinta la posee José Naranjo, caracterizado por ‘chispazos intermitentes’. Su misión es, precisamente, que esos golpes de calidad sean lo más frecuentes posibles, pero su inicio de temporada está lejos del anterior. Tanto es así que, a pesar de su sobresaliente pegada, solo ha anotado un gol en trece compromisos. De hecho, ya recibió un 'toque de atención' por parte de Gomes en favor de Hugo Vallejo. En la punta de lanza, Espiau y Yuri formaron dupla durante diversas jornadas, si bien llegada de Sergi Enrich añadió un elemento de peso a esa rotación. Con el pobre rendimiento de otra incorporación sonada, Derik Lacerda, la ‘vieja guardia’ se ve obligada a dar un paso al frente. Claro está que Yuri cuenta con el condicionante de la edad, ya 40 años, y las exigencias hacia su figura deben ser conscientes de ello. En el caso de Espiau, ha anotado dos dianas en quince partidos, cifras mejores que durante la anterior primera vuelta, pero peores que tras su explosión en la segunda.
Ante el escaso rendimiento de los fichajes del mercado estival, los más veteranos están obligados a aumentar sus prestaciones, aprovechar la química que se creó entre ellos y tirar del carro. Todos ellos ya han demostrado que cuentan con un nivel más que decente para la categoría, algo de lo que se está deseando servir José Gomes.
La ‘vieja guardia’, obligada a dar un paso al frente
Ante las decepciones de los fichajes, hombres como Agus Medina, José Naranjo, Alex Pascanu o Erik Morán deben mejorar sus prestaciones para volver a ser decisivos
09/11/2022
Actualizado a
09/11/2022
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