La Ponferradina ganó en Espiñedo para seguir recuperando las buenas sensaciones y las victorias fuera de casa, para ahora conseguir volver a sumar en casa en el conocido como ‘Derbi de los Ancares’.
Será el cuarto y último enfrentamiento ante los equipos gallegos, entre los cuales la Ponferradina no ha perdido ninguno, a la espera de recibir a sus vecinos más cercanos. Además justo han coincidido, tanto la ida, como la vuelta con el mejor momento de la temporada de los de Javi Rey consiguiendo una regularidad que les permite estar en la zona más alta de la tabla.
No pinta tan bien para los lucenses que antes de llegar al Toralín, tendrán que verse las caras contra el Celta B este miércoles a las 19:00 horas en Balaídos. La razón es que será el partido aplazado de la jornada 21 que no se pudo disputar por las intensas lluvias en Galicia, de la misma forma que se aplazó en su día el Arenteiro - Barakaldo, que ya se ha disputado.
El Lugo jugará este miércoles en Balaídos a las 19 horas y el domingo en Ponferrada a las 17:30 horas
Jugarán el miércoles, para tener jueves, viernes y sábado para recuperarse y preparar el partido ante la Ponferradina del próximo domingo a las 17:30 horas. Aunque ese no fue el primer horario que tuvo la Federación para el partido, ya que cambió hasta tres veces de hora, primer el viernes a las 20:30h, inviable por las horas de descanso del Lugo jugando un miércoles, más tarde a las 19:30h, pero viendo la cercanía de las ciudades, quizás se optó por la definitiva, las 17:30h.
Otra de las claves del encuentro, además del cansancio de los lucenses, será su mala racha fuera de casa, donde no ganan desde el 27 de octubre en Tajonar. Solo dos victorias, cuatro empates y 9 goles a favor, son los números de un Lugo que ahora mismo marca la última posición del descenso.