Le debe mucho la lucha leonesa a algunas pioneras que no solo se plantaron en el centro del corro, también supieron poner lucha y había enfrentamientos tan esperados como cualquier otro combate. Entre medios y pesados, subían y bajaban pues andaban en el límite, hicieron historia los enfrentamientos entre Marta Llamazares, Miriam Marcos y Mónica Matía, tres nombres para no olvidar en el capítulo de ‘agradecimientos’. La menos habitual era Marta, que jugaba también a fútbol sala, se apuntaba a causas solidarias en el extranjero o de estudios... pero cuando estaba, se notaba.
De vez en cuando regresa de alguna parte y reaparece. Lo ha vuelto a hacer este año, con sus silencios, su pelo blanco no de anciana sino de sabia y ya el primer día se le notó que ‘no estaba luchada’ pero sabía luchar. Ha ido dando pasos y en Vegaquemada se metió en la final, ante la dominadora del peso y nueva líder, Luzma Carcedo, después de haber derrotado a otra aspirante, Alicia. Pronto avisó de sus intenciones y le dio una entera a la del Condado, que reaccionó como un resorte, tiró de raza y poder y acabó llevándose el corro y haciéndose con el liderato que buscaba desde que regresó (se perdió los primeros corros) y tal vez no lo abandone ya más... si todo va normal.
En ligeros y pesados hay una circunstancia común: faltan dos de las más claras aspirantes; Priscila, con un dedo roto, en ligeros; y Cecilia, que se lesionó en Taranilla, en pesados. Es la época de estas cosas, en el maratón de agosto y cercanías. Sin ellas, en ligeros Bea se muestra como la más solvente aunque Isa ‘La Niña’ Justel nunca aparca la raza y no le regala nunca nada, ayer tampoco en una final ‘habitual’ en la que no le pudo dar ninguna caída. Bea se había tomado antes la revancha deportiva de Taranilla y derrotó a la vencedora, Sandra, sin darle ninguna opción. La Pelirroja de Oro quiere sumar puntos pues teme que cuando comience el curso y regrese a sus estudios de Medicina si le ponen prácticas se tenga que perder algún corro;lo que ocurre es que Isa está igual y parece que se tendrá que ir antes del final de Liga.
Una nueva lesión en pesados, la de Lucía López, redujo mucho la categoría de pesados, donde Edi se encontró con la papeleta de luchar ‘a las judokas’ que han irrumpido en los últimos corros de la mano de otro histórico, Fernando Viñuela. Tiene mucha calidad la aparentemente frágil Edi y supo mover muy bien, esperar y aplicar mañas de lucha a la jodoka cántabra Lucía López-Doriga y se resarció de paso de la derrota en Taranilla que le había dejado mal sabor de boca.