Pese a conquistar el oro en arrancada, la haltera berciana se tuvo que conformar con la plata en Total Olímpicocon 241 kilos tras la exhibición de Darya Naumava en Dos Tiempos. La bielorrusa firmó un concurso perfecto que le permitió recuperar dos kilos de desventaja los que partía y subir a lo más alto del podio con 242.
Y eso que la competición no pudo empezar mejor para la española. Los 105 kilogramos que Valentín pidió en su primer intento en Arrancada fueron un aviso a navegantes, especialmente ante las dificultades de sus rivales con pesos mucho menos exigentes.
Así, la berciana salió a escena cuando únicamente la francesa Nayo y la propia Naumava tenían opciones de batirla. Con este panorama, un segundo intento de 108 kilos aseguraba la primera medalla y le permitía afrontar con esperanza los Dos Tiempos pese al nulo del tercer intento.
Y es que a las molestias de Dekha, que ni siquiera compitió en arrancada, se unió laaparatosa lesion de Nayo al intentar levantar 107 kilos. Con la francesa teniendo que salir del pabellón en camilla, Naumava era el último obstáculo de Valentín en el camino hacia un nuevo Europeo, una barrera que esta vez fue infranqueable.
Con Nayo y Dekha en fuera de juego y la sueca Patricia Strenius a años luz, la final se convirtió en un pulso entre Valentín y Naumava, que fue de menos a más para llevarse el gato al agua.
Lydia empezó fuerte con un levantamiento de 130 kilos que agrandaba su ventaja tras un primer intento de la bielorrusa que se quedaba en los 126. A partir de ahí cambiaron las tornas. Naumava se vino arriba y tras un segundo alzamiento de 131 en el tercero se fue hasta los 136.
Así, tras un segundo levantamiento de 133, Valentín falló al intentar igualar la marca de la bielorrusa en su último intento y se quedó a las puertas del que hubiera sido su quinto campeonato de Europa, el tercero de forma consecutiva.
No será la abanderada
No fue el mejor día para la berciana. Al asalto frustrado al Europeo se unió la decisión del Comité Olímpico Español de que sea el piragüista Saúl Craviotto, si se clasifica, el abanderado de España en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
La berciana ya había mostrado su deseo de ser la abanderada y esperaba que haber conseguido medallas en tres Juegos diferentes hiciera que el COE se decantase por ella, pero una norma que exige dar ese honor al deportista más laureado ha terminado por desequilibrar la balanza en favor de Craviotto, que cuenta con dos oros, una plata y un bronce.