El leonés, que estaba cuajando una gran temporada antes del parón, siendo el segundo máximo artillero ademarista con casi cuatro goles y medio por encuentro en liga, levantará la mano para continuar en el equipo de su tierrapese a que el club «no aceptó la contraoferta» presentada por el extremo tras la propuesta inicial.
Y es que, consciente de que la epidemia del coronavirus limita sensiblemente la capacidad de maniobra del club, inmerso en un ERTE y pendiente de calcular las pérdidas que provoca, Mario López señala que «lo más seguro es que renueve por un año con las condiciones iniciales. Ahora el club tiene la incertidumbre de cómo va a ser la situación para la temporada que viene, por lo que lo más justo sería firmar hasta 2021 y cuando pase toda esta tormenta y las cosas hayan vuelto a la normalidad, sentarse y volver a hablar».
«El club no hizo el esfuerzo que pedía en la contraoferta, está con la incertidumbre de ver qué pasa tras todo esto»
Así, pese a que lamenta que «el club no aceptara ese esfuerzo que yo les pedí para hacer esa mejora, comentándome que no ayudaba el tema del ERTE a la hora de aclarar el futuro», sí que confía en que «no haya problema en el tema de la duración y se cierre pronto, ya que hablé con Cadenas y lo ve bien».
«Una de las cosas que me tiraba para atrás a la hora de buscar otras opciones era el de quizá no tener un partido para despedirme de la afición y de la gente. Si me tocase irme me gustaría que fuera de una forma lo más bonita posible», reconoce Mario López, que lleva ya ocho temporadas siendo pieza clave en el equipo del que era seguidor desde niño, y que reconoce que «cuanto más pasa el tiempo, más complicado se antoja que se pueda reanudar la liga. Las medidas se van a ir aflojando progresivamente y pienso que competir con normalidad va a ser imposible, no sé cómo se plantearía volver a los entrenamientos, si se jugaría a puerta cerrada...».
«Si la liga se cancela, lo lógico es coger los puestos actuales o de la primera vuelta para Europa y que no baje nadie» Todo teniendo en cuenta que no sería inmediato el regreso de la competición, puesto que «tras un mes en casa necesitaríamos una pretemporada de un mínimo de 15 días» y que aún así, en los casos de jugar cada 48 o 72 horas que se están planteando, «existiría riesgo de lesión, porque está claro que el cuerpo no está preparado para ello y menos de después de un mes así, aunque en mi caso no noto que haya perdido a nivel de musculación y quizá sí se note más la resistencia». No obstante, Mario sí que cree que «si no hay otra alternativa no queda más que aceptarlo.Si a puerta cerrada es la única forma de completar la liga y toca jugar en el mes de junio o principios de julio, empezando eso sí más tarde la siguiente liga, se hará, aunque decida lo que se decida alguien no quedará contento».
Aunque más polémica aún habrá en caso de cancelación, donde Mario cree que «lo más lógico sería coger los puestos de Europa con cómo está actualmente la liga o con los puestos de la primera vuelta, no descender nadie, ascender los dos primeros de Playa y hacer liga de 18».
Por último, sobre el ERTE presentado por el club, ya más en frío el extremo afirma que «vemos que es una medida necesaria para la supervivencia de los clubes, habrá que esperar a que pasen un poco los meses y vean el impacto. Lo primero es que el club se mantenga, sobreviva y esté saneado, pero si no nos pagan la diferencia confiamos en que sea por causa de fuerza mayor, no por ahorrarse dinero a nuestra costa».