Mes y medio sin goleador

Llega uno de los tramos más importantes de la temporada y el Abanca Ademar deberá afrontarlo sin el jugador que probablemente sea más insustituible de la plantilla.

Y es que Federico Vieyra, único lateral zurdo y máximo goleador de la escuadra ademarista, estará «entre cinco y semanas» alejado de las canchas después de sufrir, según apunta el doctor Enrique Fernández Torres, una «fractura en el primer metacarpiano de la mano izquierda», si bien aclara que «la buena noticia es que no hay desplazamiento y que se ha producido en la zona central, con lo que, en principio, no requiere cirugía, lo que hubiese alargado bastante los plazos de recuperación».

La acción se produjo en el último ataque ademarista del partido en Benidorm, cuando el argentino realizó un lanzamiento que no encontró puerta y tras el que explica que «hice el clásico gestode seguir un poco el brazo y le pegué en el codo del defensor con la mano».

La lesión se produjo en el último ataque del Ademar en Benidorm, al pegar en el  codo del defensor tras lanzar Un dolor inicial al que en un primer momento tampoco dio demasiada importancia, ya que «pensé que era lo normal, muchas veces te golpeas los dedos así». Sin embargo, con el transcurso del tiempo cuenta cómo «se fue inflamando mucho más la mano, se la mostré al fisioterapeuta y me dijo que no tenía buena pinta, así que lo vendamos e inmovilizamos a la espera de hacer este lunes la radiografía para ver si había algo óseo, tras la cual me han dado ya el diagnóstico de la fractura».

Así pues, se le ha escayolado la mano,que estará inmovilizada entre tres y cuatro semanas, momento en el que verán cómo va evolucionando. No obstante antes, «en unos 10 días, quitaremos la escayola para hacer una radiografía y ver que todo suelda bien».

Un palo para Vieyra, que busca no obstante el lado positivo al apuntar que «tuvimos esa suerte de que no hay que ir al quirófano» y se muestra prudente de cara a la recuperación ya que «es la mano de tiro y hay que ver que suelde y quede todo bien, porque si se resiente y se desplaza habría que operar y sería mucho tiempo de baja».

¿El objetivo fijado para la recuperación? El argentino lo tiene claro. «Saqué mis cálculos según me lo dijeron y mi objetivo es llegar a la ‘final four’ de la Copa. Se cumplirían seis semanas ahí, algo justo, pero espero estar».

«Es la mano de tiro y hay que ver que suelde y quede todo bien, porque si se resiente y desplaza habría que operar» De momento lo que se perderá seguro el argentino, al que le benefician los 18 días de parón liguero que hay ahora por la disputa de los Preolímpicos, son los cuatro próximos partidos de la Asobal, tres de los cuales son ante conjuntos de la zona alta y rivales directos por tanto en la lucha por Europa.

Así, no estará ni en los choques en León frente a Teucro y Granollers, ni en la salida a Aranda ni en la revancha de la Copa Asobal en el Palacio frente al Naturhouse La Rioja.

Quien está pendiente de ver si llega al primero de esos choques, frente a los gallegos, o al menos a la visita de los vallesanos el 16 de abril, es Gonzalo Carou, también lesionado en el tramo final del choque ante los alicantinos, y al que hoy se le realizarán pruebas para conocer el alcance exacto de su rotura fibrilar en el abductor.