Misma sangre, diferente equipo

Cuando salió el calendario de la liga Asobal, en casa de los Martínez tenían claro qué partidos querían mirar cuando coincidían. Esos duelos entre Ademar y Torrelavega que pondrían frente a frente por primera vez sobre una cancha de balonmano a los dos hijos del que fuera segundo entrenador muchos años y primero una temporada de la escuadra ademarista, Isidoro. Un Antonio asentado en la primera plantilla de los leoneses y un Isidoro que se estrenaba en la máxima categoría tras lograr el ascenso con los cántabros.

No pudo ser en la primera vuelta, pues le pilló lesionado a un Antonio que estaba a punto de reaparecer pero se lo perdió. Y tuvo un preámbulo en el amistoso invernal, aunque sin ser de competición no es lo mismo. Pero será este miércoles, cuando ambos equipos se midan en el Palacio, el momento en el que se inaugure este duelo.

Será un choque difícil de olvidar para los dos pero especialmente señalado para Isidoro, que llega además como líder de un Torrelavega en el que el central está completando una excelente temporada, yendo de menos a más y siendo con diferencia su máximo goleador, pues tiene 20 tantos más que el siguiente.

«Se me hará raro, llevo yendo a ver ahí al Ademar desde pequeño. Con mi hermano hay pique sano» «El partido de ida fue bonito por ser mi club de siempre el que estaba enfrente, pero este en el Palacio va a ser el más especial de mi vida, porque supone volver a mi casa, jugar delante de mi familia y amigos, hacerlo contra mi hermano estando él en el equipo en el que me he criado y ante los aficionados entre los que yo tantas veces me he sentado», reconoce un Isidoro Martínez que supone que «se me hará raro, porque al final llevo yendo a ese campo a ver el Ademar desde pequeño».

¿Sobre el duelo con su hermano? Isidoro reconoce que «de momento hay un pique muy sano y bastante relajado, no está habiendo mucho aunque igual ahora cuando se acerque cambia», algo sobre lo que su hermano bromea diciendo que «a ver, igual los días previos aumenta, pero lo que está claro es que tenemos muchas ganas de enfrentarnos y que yo me alegro de hacerlo y de la grandísima temporada que está haciendo, es pieza clave de su equipo».

Con el corazón dividido afrontará el choque la familia, entre los que Isidoro cree que «mi madre al menos irá con nosotros, que somos el rival más débil», y Antonio reconoce que «no he querido ni preguntarlo por si acaso...».

«Le doy mucha importancia a los estudios y mi idea es seguir aquí durante la carrera, pero siempre tuve el sueño de jugar en Ademar» Protagonismo tiene más el central de los cántabros, que no oculta que «no esperaba que salieran tan bien las cosas, a nivel personal estoy muy contento pero hay que salvarnos que es el objetivo principal», yque reconoce que lo que más le costó fue «adaptarme al físico y el juego de la Asobal, con defensores con más kilos y altura atrás, y gente con más facilidad para hacer gol en ataque».

Lo hizo y no dejó ya de crecer, algo que intentará demostrar ante un Ademar al que ve «en un ‘momentazo’ de juego tras las dudas del inicio, con el equilibrio encontrado y con un Malasinskas que para mí es el mejor fichaje que ha habido en Asobal en este mercado»; y en el que intenta ir aumentando protagonismo un Antonio que al menos está ya «al 100% y sin que quedara ninguna molestia tras mi lesión».

Antonio: «Lo mejor es que estoy ya al 100%. Tengo ganas de enfrentarme a él, está haciendo un gran año» Este miércoles estarán frente a frente. Misma sangre, diferente equipo. Pero en un futuro cercano, ¿podrían estar en el mismo? El tiempo lo dirá pero Isidoro, que ha renovado por dos años más en Torrelavega, reconoce que «le doy mucha importancia a los estudios, los priorizo, y mi idea es seguir aquí, donde estoy muy bien, al menos mientras dure la carrera, pero siempre he tenido el sueño de jugar en el Ademar y quién sabe, igual se acaba dando, a mí me encantaría».

Méritos empieza a hacer para ganárselo. Aunque esta vez lo que pueda darles es más que nada un disgusto...