Es el caso del Nantes, primer rival del Abanca Ademar este domingo (17:00 horas) en el grupo C del torneo y que es sin duda todo un equipo de Liga de Campeones más allá de que su cuarto puesto en liga la pasada campaña le haya llevado a disputar esta Copa EHF, la última de la historia, ya que la próxima temporada pasará a denominarse Liga Europea.
De hecho, el Nantes venía jugando Liga de Campeones las últimas tres temporadas al igual que lo hizo en dos el Abanca Ademar. Sin embargo, el equipo francés peleó por el título alcanzando la final en 2018, cayendo en Colonia ante el Montpellier que precisamente eliminó al equipo leonés en el camino hacia los octavos de final.
El equipo francés jugó la final de ‘Champions’ en 2018 y mantiene hasta 9 jugadores de los que la disputaron Porque a todos los niveles el Nantes es un equipo de Liga de Campeones, empezando por una estructura de club que sustentan los cerca de 8 millones de presupuesto con los que cuenta. Es el equipo que entrena el exademarista Alberto Entrerríos uno de los más poderosos de la potentísima liga francesa aunque muy lejos de un Paris Saint Germain que cuenta con casi 18 millones.
Un poderío económico que ha permitido al Nantes conformar una plantilla de auténtico lujo en la que, para hacerse una idea, contó con cinco jugadores en el último Europeo. De ese equipo que llegó a jugar la final de la Liga de Campeones se mantienen nada menos que nueve jugadores de los que dos son españoles. Eduardo Gurbindo, que no podrá estar por lesión el domingo y David Balaguer jugaron aquella final, sumándose el verano siguiente Valero Rivera y este mismo año otro exademarista como Antonio García para completar un equipo con un tremendo acento español.
Estrellas en cada posición
Y es que haciendo un análisis de la plantilla, casi cada jugador del Nantes es internacional y tiene experiencia al más alto nivel. En portería, Cyril Dumoulin, ha sido campeón de Europa y del mundo con Francia mientras que el joven Emil Nielsen, que ya amargó un par de tardes al Ademar en las filas del Skjern, es el futuro de Dinamarca.En los extremos, poco hay que decir de los españoles Valero Rivera y David Balaguer, habituales en la selección española hasta este último Europeo que el zurdo se perdió por lesión a última hora. Junto a ellos, el joven danés Sebastian Augustinussen y un jugador de los que hacen equipo como Julian Emonet. Completan la segunda línea en el pivote dos jugadores que estuvieron en el último Europeo, el bosnio Senjamin Burić y el futuro de la selección francesa, Nicolas Tournat, ya fichado por el Kielce para la próxima temporada, dejando un hueco que deberá ocupar el tercero en discordia, el también francés Dragan Pechmalbec.
Pero si potente es la segunda línea del Nantes, puede serlo más la primera. En la dirección, el esloveno Rok Ovnicek y un goleador como Aymeric Minne son dos referencias. Sin embargo, el líder de esa primera línea es sin duda el exbarcelonista Kiril Lazarov, con muchas esperanzas puestas en una de las sensaciones del último Europeo, el joven portugués Alexandre Cavalcanti. La veteranía es sin duda el denominador común de los que les rodean, con Eduardo Gurbindo, Olivier Nyokas y Antonio García. Además, en defensa cuentan con la presencia del también veteranísimo Rock Feliho como especialista.
Un pabellón a la última
Fuera de la cancha, el poderío del Nantes también se hace notar especialmente en su casa, el Palais de Sports de Beaulieu o como se le conoce habitualmente el ‘H Arena’, precisamente haciendo honor al equipo de la ciudad. Los aficionados leoneses que se desplacen a la ciudad francesa podrán disfrutar de un espacio que está próximo a finalizar una reforma que ha durado 4 años y que le convierten en una referencia en el mundo del balonmano.Tienda, restauración (comida rápida, bares y hasta una crepería) para reunir a los aficionados antes y después de los partidos con presencia incluso de jugadores, un novedoso sistema de pago sin efectivo dentro del recinto hacen que el pabellón roce el lleno con cerca de 6.000 personas en cada partido. De hecho, apenas quedan poco más de 300 entradas disponibles para el encuentro del domingo, en el que el Abanca Ademar buscará dar la sorpresa ante todo un gigante.