Hay tantos que recuerdas con el paso de los años. Goles que valen ascensos, que forman culturalistas y hacen que los disgustos de los que ya lo son se den por buenos a cambio de vivir momentos así. Instantes que pueden marcar temporadas y que regresan a la memoria si al final acabas logrando el objetivo.
Y el del Nou Estadi pasa a ser para la Cultural uno de ellos. La maldición de Tarragona, donde los leoneses nunca en su historia habían ganado al Nástic, tenía que acabarse a lo grande. Y ganar 2-3 con un gol en el minuto 94 sin duda puede calificarse así.
Montó la contra el equipo leonés por la derecha, como casi siempre desde su salida por medio de un enorme Calderón. Intentaba volver a parar con falta la jugada como siempre en las transiciones el Nástic, con el interior habiendo forzado ya tres en la segunda parte, pero esta vez ni intentando agarrarle pudieron evitar que se fuera por velocidad hacia línea de fondo y con un rival encimando pusiera un centro espectacular.
Escobar forzó con un tiro que paró el portero el gol en propia del Nástic y se inventó el segundo a pase de Artola
Pero el pase hay que hacerlo bueno rematando y en área pequeña, solo tras perder la marca Óscar Sanz, apareció el jugador del filial Ian Martínez, que había entrado al campo a nueve minutos del final, para conectar un buen cabezazo que se sacaba de encima con una gran parada el portero, llegando el delantero todavía antes que nadie al rechace para mandar el balón al fondo de la red, sellando el triunfo visitante y llevando al éxtasis a todo el culturalismo.
Sí, otra vez en el descuento. Sí, otra muestra de fe inquebrantable. Sí, tras pinchar todos los perseguidores la Cultural vuelve a sacarle ¡ocho! puntos al segundo clasificado. Sí, no es un sueño, tras ir ganando 0-2 y ver cómo te empataron en apenas tres minutos, todavía el equipo de Raúl Llona fue capaz de rehacerse del tremendo palo anímico que hubiera tumbado a tantos y tantos clubes para acabar el partido atacando y obtener el premio de los tres puntos.
Y es que es un equipo para disfrutar. ¿Que no está Manu Justo? Pues el ‘tiburón’ Escobar vuelve a demostrar que tiene un olfato de gol tremendo y fabrica el primero y mete el segundo.¿Que el Nástic tiene dinamita en las transiciones? No pasa nada si está Sergi Maestre, que sin participar en ninguno de los tres goles fue capaz de ser el mejor del partido con una actuación sobresaliente, hinchándose a robar balones y a jugarlos luego con criterio, y dominando en el centro del campo junto a un buen Barri.
Con 0-2, Chacón perdonó el tercero en un mano a mano y el árbitro perdonó una clara roja a Gorostidi
Fue una máquina bien engrasada la Cultural, a quien además se le puso muy pronto el partido de cara. Cinco minutos tardaro en adelantarse los de Raúl Llona, tras ganar un duelo Escobar a los centrales y sacarse dentro del área un buen disparo que rechazaba el meta y Pol Domingo, al ir a despejar presionado por Artola, se acababa metiendo en su propia portería.
Controlaba el partido la escuadra leonesa pero se libraba del empate en la primera y única (pero muy clara) oportunidad del Nástic en la primera parte, cuando tras un centro de Oriol desde la izquierda Pablo se anticipaba a Satrústegui pero su remate a la altura del punto de penalti se iba por milímetros.
En tres minutos, con una contra y un doble error de los centrales, el Nástic marcó dos goles y empató
Perdonaban los catalanes pero no los leoneses, con Escobar ‘inventándose’ el 0-2 con un golazo tremendo. Él robó el balón en campo contrario y, tras asistirle Artola, controló dentro del área, recortó para colocarse el balón hacia la derecha y se la cruzó al meta rival.
Ver para creer. ¿Era inmejorable? No, porque entonces llegaron dos jugadas que pudieron haber sido claves. Primero un nuevo grave error arbitral, el cuarto muy claro y grave en contra de la Cultural en las cuatro últimas jornadas, permitía al Nástic seguir con once al perdonar la clarísima expulsión a Gorostidi por un codazo a Artola teniendo además ya amarilla y pitándose la falta. Después, los leoneses perdonaban el tercero tras dejar Pibe solo ante el meta a Chacón pero acabar sacando Pol bajo palos el disparo del mediapunta que ya se colaba tras picársela a Varo.
Durante mucho tiempo parecía que iba a haber que acordarse de eso, porque en cuatro minutos se pasó al 2-2. Para colmo, en los mismos minutos que en aquel fatídico partido de Segunda que acabó provocando el descenso, en el 54 y el 57 tras irse también los leoneses 0-2 a vestuarios.
En el 94 un sublime Calderón montó la contra, puso un gran centro e Ian, en el rechace de su propio remate, hizo el 2-3
El 1-2, tras una pérdida en campo propio de Artola que propició una contra que con ese resultado no se puede permitir y que resolvió magistralmente Narro (el mejor de los locales) tras recortar dentro del área a Fornos.
El 2-2, tras un imperdonable doble error defensivo de los centrales, con Fornos dejando solo a un rival dentro del área tras intentar anticiparse y fallar en el despeje, y Satrústegui despejando muy mal y propiciando que el balón le llegara solo a Pol para que esta vez sí marcara en la portería que quería.
Sufrió en los momentos posteriores la escuadra culturalista, pero poco a poco se fue quitando el dominio de encima. Y al final, tras un par de sustos y cuando parecía que el empate le valía a ambos e iba a ser inamovible, llegó la locura con ese 2-3 que supone un tremendo puñetazo sobre la mesa.