"No busco revancha ni demostrar nada, sí que no me vuelva a superar la situación"

león. Tras toda la vida en el Abanca Ademar, en su primer partido con el Benidorm le tocó medirse al club de su vida, al que ahora, si el físico se lo permite, volverá a enfrentarse mañana. Un día especial para el extremo leonés Mario López, que analiza en una entrevista cómo llega a la cita, los recuerdos de la primera vuelta, el nivel de Gonzalo tras varios años a su sombra o el futuro.

–El primero llegó sin casi tiempo para pensar en él, ¿cómo afrontas esta segunda vez en la que te enfrentarás al Ademar?
–Está claro que es un partido especialtanto por lo que significa jugar contra el club de tu vida, como por hacerlo contra compañeros, cuerpo técnico, buenos amigos... tengo muchas ganas.

–El miércoles contra el Granollers te no pudiste jugar. ¿Qué te ha pasado? ¿Llegas al partido del sábado?
–Está complicado que pueda estar, en el entrenamiento del sábado tuve un tirón en la zona del abductor de la cadera y estoy un poco pendiente del diagnóstico. En la reanudación de la liga ya me impidieron estar y veremos si desaparecen de aquí al sábado.

«Es un reto que esos sentimientos encontrados no me afecten. En León no fui yo, estuve fuera de mí» –Vaya rabia te daría perdértelo...
–Un poco, por ser el Ademar y porque esta minipretemporada la había hecho bastante buena y me había encontrado muy bien. Estaba muy motivado de cara a la segunda vuelta y de repente días antes de empezarla pasa esto...

–Si finalmente puedes jugar, ¿lo afrontarás con ciertas ganas de revancha o de demostrar algo?
–A nivel personal no tengo ni revancha ni ganas de demostrar nada en la pista, creo que ya estuve muchos años en León, demostré todo lo que tenía que demostrar y tengo cierto rédito a nivel deportivo, porque además las circunstancias de mi salida no tuvieron nada que ver con ello. La revancha sería a nivel de equipo, por plantearse el ganar a uno de los mejores y por quitarme la espinita del mal partido que hice en León.

–¿Te afectó mucho en ese debut el hecho de medirte al Ademar?
– Me superó un poco la situación, es uno de los partidos más extraños en cuanto a sensaciones de mi carrera y un reto ahora el conseguir ser suficientemente maduro para que esos sentimientos encontrados no me afecten. Es verdad que fue un cúmulo de circunstancias aquel día, que fuera el primer partido de liga le dio una presión añadida, mi deseo es que no vuelva a pasar lo mismo y esté al nivel que vengo estando sin que me afecten al rendimiento estas circunstancias extradeportivas.

«De la salida me da pena que debimos sentarnos a hablar y hallar una solución. No hubo predisposición por ambos» –Es que es difícil recordarte un partido con más fallos en los últimos años...
–Lo comenté con mucha gente, que no tenía la sensación de estar dentro del partido. Fue una situación muy rara, yo soy muy expresivo y no me salía ni celebrar los goles, ni animar...no era yo, estaba fuera de mí. Al final sabía que tenía todas las miradas puestas en lo que hiciera y siendo el primer día... no se podría haber dado en un momento peor, pero fue un peso que me quité de encima y una vez jugado me centré únicamente en mejorar mi nivel.

–Con el Ademar siempre estuviste en la zona alta, ¿cómo llevas el que esta temporada Europa se acabara tan pronto y en liga se podría decir que estáis casi en zona de nadie?
–Nos afectó mucho sobre todo el tema de Europa, que si pierdes deportivamente no te queda otra que comértela, pero el hecho de que fuese en los despachos a nivel de equipo nos dejó tocados. La mayor razón por la que decidí escuchar y aceptar la oferta es porque deportivamente no se presuponía tan grande el cambio por jugar las mismas competiciones, pero se acabó pronto y eso nos hizo entrar en la primera vuelta en una época bastante mala. Es raro estar en una zona fría, que estas más cerca de engancharte al grupo de arriba que de meterse en el pozo, pero siempre es más difícil estando así encontrar la motivación semana a semana y ser capaz de dar el 100%, debes ser aún más profesional y lo que ayuda es a ganar un punto de madurez de ponerme retos personales. Lo bueno es que yo venía de la exigencia de Manolo Cadenas, así que estoy bien educado como para no entrar en relajación sea cual sea la situación.

«No me sorprende cómo está Gonzalo, sabía su potencial. Aprovechó la oportunidad y demostró de lo que es capaz» –¿Te arrepientes de algo en todas las circunstancias que rodearon a tu salida del Ademar?
–Me da pena que las circunstancias fueran las que fueron, había soluciones mucho más fáciles que acabar yendo a juicio y finalizando una relación de tantos años. El haberse sentado a hablar, encontrar una solución... no hubo esa predisposición por parte de ambos, no vamos a buscar culpables, pero si se hubiesen hecho las cosas de otra forma sería distinto, no era tan difícil y nos hubiésemos ahorrado dolores de cabeza unos y otros. Pero al final fue la gota que lo colmó y no hubo vuelta atrás, pero no me arrepiento de ninguna de las decisiones que tomé, estoy con la conciencia tranquila y en paz conmigo mismo a nivel moral.

–La explosión de Gonzalo ha conseguido dejar bien cubierto el puesto. ¿Te ha sorprendido su explosión?
–La ver dad es que no, llevo varios años entrenando con él y conocía el potencial que tenía. En parte tanto él me quitaba tiempo de juego a mí como yo no le dejaba tener más a él, el tener un puesto tan competido no nos beneficiaba a ninguno de los dos en cuestión de minutos, sí a nivel de exigencia que yo sabía que tenía detrás a alguien que si me relajaba me pasaba por la izquierda y me hacía sacar mi mejo rendimientos. Pero había partidos que estaba haciéndolo bien y no gustaba sentarte, y conversé muchas veces con él sobre el hecho de que Gonzalo quería jugar más minutos y podía dar un rendimiento más alto. Nos ha beneficiado a los dos, yo he mejorado mis números porque también juego más, y él ha demostrado de lo que es capaz. Me une una gran amistad con él y me alegro de no haberme equivocado cuando pensaba que el puesto quedaba cubierto pese a mi marcha, ha sido un beneficio para él y una oportunidad que está aprovechando.

«Tengo la mente abierta a ir al extranjero. Salir de León era difícil a nivel sentimental, ahora no hay tanto vínculo» –Le dirías en esas conversaciones de amigos que bajara el nivel, que se te echara algo más de menos....
–No bueno, si acaso bromeaba con que yo me fui y te dejé una alfombra roja, o cuando a la última concentración de la selección le llaman a él y a mí no, que le tengo envidia sana, pero que se lo merece y tiene que disfrutarlo, que si estuviéramos en Europa nosotros igual cambiaba la cosa. Me alegro por él, pero en verdad solemos hablar más de temas personales que de balonmano.

–Llega la época en que se mueve mucho el mercado del balonmano. ¿Tienes claro qué hacer el año que viene?
–Tengo todas las opciones encima de la mesa, en Benidorm estoy muy a gusto, aunque es cierto que por lo que pasó en Europa la temporada ha sido un poco más gris y por debajo de las expectativas deportivas. Tengo la mente abierta a escuchar todas las opciones que lleguen, sobre todo con la puerta abierta a una posible aventura en el extranjero, lo pensaba desde hace tiempo pero salir de León era mas complicado por todo lo que significaba a nivel sentimental, mientras que ahora el vínculo no es tan grande.