Más o menos injusto, más o menos merecido, el fútbol tiene la virtud de no engañar a nadie dejando claro que lo único que valen son los goles y este domingo, en El Toralín, la Ponferradina le puso casi todo al partido para sumar tres puntos que no llegaron simplemente porque faltó el gol.No estuvo acertada de cara a la portería rival la Deportiva, que se quedó sin hacer gol por séptimo partido esta temporada, tanto por falta de puntería como por la buena actuación de un Casto que apareció cuando debió hacerlo para evitar el tanto berciano. Una falta de gol que incluso dio pie a que el Extremadura pudiera llevarse mayor premio de El Toralín, si bien esa falta de acierto ofensivo que protagonizó el partido también se dio sobre la portería de René para igualar las cosas y dejar ese empate a cero final.
Sabían los dos equipos de la importancia del encuentro, tanto la Deportiva para coger aún más renta sobre la zona de descenso y convertir el sueño de la pelea por el ‘playoff’ en una realidad como el Extremadura precisamente en no alejarse demasiado de la salvación sabiendo que puntuar a domicilio era un buen resultado. Por todo ello, parecieron primar el no arriesgar demasiado y esperar a que el fútbol ofreciera una oportunidad para intentar aprovecharla, lo que dejó una primera parte en la que apenas ocurrió nada.
Tras un susto en el inicio del segundo tiempo, los locales apretaron pero Olabe pudo adelantar a los extremeñosBolo, con el mismo once de las dos últimas semanas, no consiguió que su equipo mandase sobre el terreno de juego hasta superado el ecuador de ese primer acto en lo que precisamente coincidió con los mejores minutos de la Deportiva en ese tramo de partido. Hasta entonces, pareció dejar mayor sensación de peligro un Extremadura que, por otra parte, apenas disfrutó de un par de lanzamientos muy desviados de Cristian y Álex Alegría. En la Ponferradina, los acercamientos fueron tímidos con disparos lejanos de Ivi y Yuri y es que el peligro berciano llegaba casi de forma exclusiva cuando era capaz de robar y salir rápido a la transición, aunque sin claridad en el último pase. Los de Almendralejo, apostando por el juego directo, hacía que el balón pasase continuamente por encima de los Sielva y Larrea que debían dar criterio al equipo blanquiazul, que fue creciendo hasta el tiempo de descanso aunque con la necesidad de subir una marcha el ritmo del partido si quería complicarle la vida a una seria zaga extremeña.
Y lo que estuvo a punto de llegar tras la reanudación fue el gol visitante. Un error de Russo tras el saque inicial permitió a Pinchi robarle el balón a Trigueros y afrontar el mano a mano contra René, si bien el argentina enmendaba su error parando al mediapunta a escasos centímetros del área convirtiendo el problema en menor, ya que la falta no derivó en mayor peligro, si bien le costó una tarjeta al central que le impedirá estar la próxima semana en Girona.
Superado ese inesperado inicio, pareció despertar lo ocurrido a la Ponferradina que a partir de ahí comenzó a inclinar el partido hacia el fondo norte que atacó de nuevo en la segunda mitad. Pablo Valcarce tuvo la primera ocasión clara tras un centro de Ivi que se encontró prácticamente sobre la línea de gol, pero que no acertó a rematar hacia la portería. Poco después y en medio de los aparentes problemas de funcionamiento del VAR, un buen centro de Ríos se paseó por el área pequeña del Extremadura sin que nadie acertara a rematarlo con Casto ya vencido.
Javi Navarro y Yuri tuvieron la opción de dar el partido a los suyos en un tramo final en el que Lomotey vio la rojaSabían sufrir los visitantes buscando una acción en la que pudieran sacarse de encima la presión berciana y la encontraron a lo grande. Una buena combinación por la izquierda tras un saque de banda permitió a Alegría poner un balón franco en el punto de penalti a Olabe que, con todo a favor, mandaba su lanzamiento a la derecha de la portería de René.
Se lamentó amargamente el conjunto azulgrana, este domingo de blanco, consciente de que iba a poder disfrutar de pocas ocasiones mejores para asaltar El Toralín. De hecho, desde ahí y hasta el final el gol solo amenazó una portería y esa fue la del Extremadura. De hasta cuatro ocasiones dispuso la Ponferradina hasta el final del partido, incluyendo un descuento en el que el conjunto berciano contaría con un jugador más sobre el terreno de juego tras la expulsión por doble amarilla de Lomotey.
Un disparo alto de Larrea y un par de centros que no encontraron rematador fueron la antesala de las dos más claras. Primero Javi Navarro, que había entrado por Valcarce, encontró un disparo cruzado desde dentro del área que se marchaba por centímetros a la derecha de Casto. Después, el guardameta salvaría a los suyos sacando sobre la línea y golpeándose contra el palo un cabezazo de Yuri en el segundo palo tras un gran centro de Son.
Pero no era el día y con el pitido final la Ponferradina sumaba un punto que deja un sabor más bien agrio en un partido que además se veía como clave para cambiar de mentalidad. Sin embargo, la lectura puede ser también positiva y es que el punto sumado mantiene la zona de descenso a 8 puntos y deja el sueño del ‘playoff’ a solo 3. Ahora toca pensar en cambiar el ‘chip’ e intentar dar la sorpresa en el campo de otro de los candidatos al ascenso, el Girona.