Que el VAR ha cambiado el mundo del fútbol es una obviedad. A veces te beneficia, otras te perjudica y en alguna incluso señalando con la ayuda de una pantalla sigue generando polémica. Lo sabe bien la Ponferradina, que ha vivido ya numerosos momentos decisivos con esta herramienta, pero ninguno como los que ha encadenado en apenas cuatro días.Porque si frente al Villarreal B la colocación de las líneas para marcar el fuera de juego que anulaba su gol del triunfo en el minuto 97 dejó muchas dudas, frente a Las Palmas vivió otra experiencia nueva: ver cómo una jugada que sin VAR habría terminado en tanto anulado y amarilla se convertía en ‘diana’ de los visitantes y roja cuando no se había cumplido la media hora para Yuri.
Una corrección con castigo doble y que acabó siendo letal vivió la Ponferradina, pues ese gol fue el que le llevó a la derrota por 0-1 frente al líder, que sólo necesitó contemporizar para tumbar a un conjunto berciano que nunca se rindió ni bajó los brazos en una demostración de derroche físico, pero jugando con diez durante más de una hora tampoco pudo inquietar a Las Palmas sin tener ninguna ocasión ni tiro a puerta para haber logrado empatar.
Con 0-0 Moi se lesionó y Vallés sacó a córner el tiro de Yuri en la que sería única ocasión y tiro a puerta local Derroche en vano porque esa jugada a los 22 minutos de encuentro acabó marcándolo absolutamente todo. Antes había llegado la primera ‘desgracia’ de la Ponferradina, pues Moi Delgado sufría un golpe en la rodilla y debía ser sustituido, no estando tampoco en el banquillo por lesión Lukaku y entrando un Pujol al que Álvaro Jiménez volvió loco por su banda.
Y también el que acabaría siendo único disparo a puerta de la Deportiva en todo el partido, de Yuri tras recibir dentro del área escorado hacia la izquierda, hacer dos bicicletas para ganar espacio saliendo hacia dentro y sacar un disparo potente pero centrado que Vallés mandaría a córner.
Todos ellos acabarían siendo protagonistas en la acción del gol. Primero porque arrancaba con Viera abriendo a banda y recibiendo tras hacerlo el pisotón de Yuri, en pleno tobillo y de forma lateral, en una acción que este año se está sancionando siempre con expulsión y que por ejemplo dejó este año al Tenerife con diez ante la Deportiva.
El gol llegó tras un centro de Álvaro que Amir despejó y entró tras dar en la espalda de Florin Andone el rechace Y después porque era por esa banda derecha de donde nacía el centro de Álvaro Jiménez, teniendo toda la mala suerte de mundo en su resolución la Deportiva pues Amir se anticipaba a Andone, pero el rechace de su despeje daba en la espalda del delantero y acababa colándose en el fondo de la red.
Tras más de cinco minutos de revisión y tras ir el árbitro hasta la pantalla, no hubo dudas. Ni el fuera de juego era ajustado como el de Villarreal ni la roja admitía dudas, por lo que el mazazo era doble para desesperación de una Ponferradina que minutos después veía cómo era expulsado también su entrenador José Gomes al protestar la no señalización de un saque de esquina.
Tocó hacer más kilómetros de lo normal y multiplicarse para cubrir los espacios. Y eso llegó para apenas conceder llegadas, llegar vivo hasta el final e incluso acabar metiendo en su área con balones colgados a Las Palmas, pero no para acariciar el empate, pues un disparo muy lejano de Nwakali y otro desviado de Heri fueron las acciones más peligrosas.
Sandro tuvo dos mano a mano que el VAR habría habilitado: uno se fue al larguero, otro lo paró Amir Tampoco las tuvo Las Palmas en las estadísticas, más allá de un tiro dentro del área de Álvaro Jiménez que se iba fuera por poco, pero sí en la realidad. Dos clarísimas, ambas en las botas de Sandro Ramírez, señaladas como fuera de juego pero que posiblemente hubieran sido corregidas por el VAR en caso de terminar en gol.
Fueron dos mano a mano contra Amir. En el primero, tras habilitarle Viera, su disparo se estrellaba en el larguero. En el segundo, con muchísimo tiempo para pensar y decidir, pues partía corriendo desde el centro del campo, Amir le ganaba la partida y le sacaba el balón.
Fallaba el punta y seguía con opciones la Ponferradina, pero de poco le sirvió. El Toralín volvía a ser asaltado, esta vez por el líder. Un rival de otro nivel y unas circunstancias de partido especiales que no deben provocar un aumento de la preocupación. Pero una racha negativa que debe empezarse a cortar ya para no verse metidos en problemas.