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Era lo que necesitaba la Ponferradina tras lo ocurrido en Almería, de nuevo ante un rival de mucho potencial y que no se guardó nada en la visita al Bierzo a pesar de lo cargado del calendario. Un Girona que salió mejor que la Deportiva, con un Pablo Moreno que demostró que el futuro es suyo poniendo en problemas a Iván Rodríguez una y otra vez. Sin Ríos, volvió el banquillo berciano a apostar por Paris a banda cambiada en una situación que más que arreglar un lateral, terminó de complicar los dos ante el mal partido del malagueño.
Porque si Gumbau mandaba fuera la primera internada del joven extremo, un error de Paris en el otro lado permitía a los catalanes pillar descolocado al equipo berciano y en tres pases permitir que Calavera pusiera un gran centro al segundo palo que Monchu remataba a gol completamente solo.
Eran las jugadas con las que comenzaba y terminaba un primer tiempo que se resumía bien en ellas, aunque ni mucho menos se mostró indolente la Deportiva a pesar de no encontrar en ningún momento el faro que debe ser un centro del campo que recuperaba a la ya mítica pareja formada por Pablo Larrea y Óscar Sielva.
Ganó el centro del campo el Girona y eso dificultaba mucho a la Ponferradina la creación de peligro, que llegó únicamente en errores propios de los catalanes. Yuri a punto estaba de aprovechar una mala cesión de Calavera a Juan Carlos, superando el ariete al guardameta en su salida y sacando un disparo demasiado flojo, lo suficiente para que Bernardo sacara el balón en la línea. Además, una falta regalada en la frontal por Franquesa a punto estaba Curro de aprovecharla tras desviarla Sylla, al que se le había anulado previamente un gol por claro fuera de juego.
Ahí, en el balón parado encontró la Deportiva un filón que explotar ante suescasa producción ofensiva y la poca contundencia que parecía mostrar el Girona en defensa.
Con el apunte en el cuaderno de cara al segundo tiempo, el descanso sirvió para que ambos equipos saltaran al terreno de juego con aires renovados, no solo la Deportiva en su evidente necesidad de dar un paso adelante en busca del empate, sino también un atrevido Girona persiguiendo el tanto que pudiera dejar el partido visto para sentencia.
Así, el ritmo fue alto de inicio y el encuentro se convirtió por momentos en un correcalles en el que hubo opciones para ambos. Doncel tuvo la primera para los locales con un disparo de volea desde la frontal que se perdió fuera y que sirvió para que el Girona se volcara durante unos minutos sobre el área de la portería defendida por Caro.
Gumbau de nuevo y Sylla pudieron hacer el 0-2 en un día en el que no pareció el Girona estar acertado de cara a puerta tal y como demostró un barullo en el área de la Deportiva en el que hasta cuatro jugadores no lograron encontrar la portería.
La entrada de Adri Castellano y una zaga más natural en sus posiciones le sentó bien a la Deportiva, que no solo defendió mejor con Amo y Pascanu muy serios, sino que también atacó mejor. Paris, de vuelta a su lateral diestro natural, firmó una gran jugada en la que lograba sacar un disparo dentro del área que Juan Carlos mandaba a córner. En el saque de esquina, Curro ejecutaba la jugada ya mil veces vista y aún incapaz de ser neutralizada en la que su centro al primer palo buscando la portería no acierta nadie a despejar y, en esta ocasión, le caía a Amo para con un buen escorzo lograr el empate.
Le restaban aún 20 minutos al partido y Francisco ya no se guardaba definitivamente nada en el banquillo en busca del triunfo. Sin embargo, supo responder bien la Deportiva a las ofensivas visitantes, especialmente las más peligrosas que tuvieron lugar con el partido en el descuento. Primero, un disparo de Samu Saiz desde la frontal lo repelía con una gran mano Caro para salvar a la Deportiva y en la última jugada del partido, Monchu remataba un córner que Kaxe salvaba bajo palos para dejar el empate en El Toralín.
Primer punto del año 2021 para una Ponferradina que cierra así la primera vuelta de competición con 31 puntos que seguramente todo el mundo hubiera firmado a principio de temporada y que permiten además sacarse el mal sabor de boca de la visita a Almería. Ahora, una semana sin partido para recuperar efectivos y comenzar la segunda mitad de la competición con el objetivo de igualar al menos la primera. Si lo logra, el equipo berciano se puede permitir soñar con algo grande.