Los puntos se siguen fugando del estadio de El Toralín y eso no significa otra cosa que problemas para la Sociedad Deportiva Ponferradina. El conjunto berciano no fue capaz de conservar ante su afición la ventaja que conquistó con un gol de Edu Espiau en la primera parte y sumó un empate que sabe a muy poco en un duelo directo ante el Racing de Santander que mantiene al conjunto berciano en zona de descenso una semana más, dejando a la vez el golaverage entre bercianos y cántabros pendiente del general.No pudo ganar la Ponferradina y son ya cuatro partidos sin conseguirlo. Que los dos equipos se jugaban ayer mucho lo demostraron buscando los puntos, sin conservadurismos, lo que ofreció un partido muy entretenido, abierto y con numerosas alternativas y ocasiones. Se ponía la Deportiva como asignatura pendiente el gol y como virtud a conservar la seriedad defensiva de las últimas jornadas y lo cierto es que en esta última parcela no pasó demasiados apuros el conjunto berciano. Con Pascanu y Amo muy serios, las llegadas del Racing apenas terminaban con disparos lejanos que con más o menos problemas Amir solventaba aunque sin demasiado apuro, luciéndose incluso de más en la más vistosa, un disparo al palo largo de Iñigo Vicente.
Además, sorprendentemente desde el ataque – aunque con Nwakali marcando bien los tiempos en la medular – partió el peligro de los bercianos. De los balones largos a la carrera al espacio de un buen Derik partieron algunas de las ocasiones locales, aunque sin excesivo acierto en la decisión final e inquietando a Parera poco más que en un disparo lejano de Dani Ojeda.
La Ponferradina hizo un gran último cuarto de hora en la primera parte, en el que anotó el gol y tiró al paloSin embargo, tras media hora de toma y daca sin que nadie lograra hacerse con el control del partido, la lesión de Matheus dejó algo tocado a un Racing que vio como la Ponferradina le iba metiendo poco a poco en su área. De nuevo con los zagueros destacados en esa parcela, Amo – que ya había tenido un buen remate a la salida de un córner – ejercía de improvisado extremo en una jugada en la que se plantaba en línea de fondo para que su pase atrás lo rematase Dani Ojeda en el punto de penalti desviando un zaguero in extremis.
Iba mereciendo el gol la Ponferradina, que lo encontraba en la cabeza de la apuesta de David Gallego para el ataque, Edu Espiau. El canario volvía a la titularidad tras perderse por sanción la visita a Zaragoza y prácticamente en el primer balón que tocaba adelantaba su equipo. Lo hacía rematando de forma sensacional un gran centro de Paris Adot, tremendamente incisivo por banda haciendo pagar a Mantilla la improvisación de su posición en el lateral izquierdo debido a las bajas.
El gol suponía toda una liberación para la Ponferradina, más aún al lograrlo con el descanso a la vista. Y pudo ser mayor la ventaja que se llevara el conjunto berciano al entretiempo, ya que de nuevo Edu Espiau sería el protagonista de un disparo desde la frontal del área que se estrellaba en el palo de la portería defendida por Parera.
Grandes sensaciones se llevaba la Deportiva al final del primer tiempo, consciente de que todavía quedaba mucho por jugar e iba a tener que defender el resultado favorable con uñas y dientes.
El técnico visitante, José Alberto, corrigió en el descanso su apuesta para el lateral izquierdo dando entrada al jugador del filial Mario García, que a pesar de debutar en Segunda hizo que le costase mucho más a la Deportiva percutir por esa banda. Además, salió el Racing, quizás por la necesidad, con una marcha más al campo desde los vestuarios.
Los bercianos fueron dando pasos atrás en la segunda mitad hasta encontrarse con el empatePrácticamente en su primera acción de ataque, un mal despeje de Diéguez permitía que el balón acabase franco para que Roko Baturina, que había entrado debutando en la primera parte por Matheus, dispusiese de una chilena con toda la portería a su favor que inexplicablemente ni siquiera le permitía enviar el esférico con dirección a la red. Pascanu evitaba el posterior rechace de Íñigo para salvar una jugada que no sería la última de peligro visitante en los primeros minutos tras tener Iñigo Vicente una acción clara que posteriormente anularía el árbitro por fuera de juego.
Mucho más atenazado, Naranjo tenía la oportunidad de abrir hueco con un remate en el segundo palo en el que no creyó lo suficiente y mandó desviado en lo que no dejó de ser un oasis en el desierto que fue la Deportiva en ataque en la segunda mitad. Porque fueron las ocasiones visitantes, primero para Mboula con un cabezazo liberado en el segundo palo, después para Pombo con un disparo desviado y después para Baturina, que tras una acción de Sangalli a punto estaba de rematar a puerta vacía adelantándose Pascanu al pie del croata.
Sin embargo, cuando aprovechando el carrusel de cambios – en el que Gallego se protegía cambiando a Morán por Nwakali – el ritmo parecía bajar y menos cosas parecían ocurrir, la conexión del filial del Racing empataba el encuentro.
Una llegada de Mario García por banda izquierda la transformaba el canterano en un excelente centro para que Yeray, que acababa de entrar, llegase desde atrás y rematase de cabeza en el punto de penalti superando a Moi y fusilando a un Amir que nada podía hacer para evitar el primer gol en Segunda del chaval de 19 años.
Todo un jarro de agua fría para la Ponferradina, que a falta de poco más de 10 minutos se veía en la situación de volver a intentar llevarse el partido en un contexto contrario a ello. De hecho, quien más apretó en esos últimos minutos en el que Yuri y el debutante Naím acudieron al rescate sin tener incidencia en el juego, fue un Racing que de hecho provocó la expulsión de Amo tras dos amarillas en apenas dos minutos para poner el borrón a un gran partido. Lo cierto es que tampoco sufrió para mantener el empate la Deportiva, que suma un punto que sabe a poco y solo el tiempo dirá de qué le sirve. Se le atraganta la victoria al conjunto berciano y la próxima semana, visitando al colista, deberá hacer los deberes para no complicar más aún su situación.