Era un partido en el que el resultado era lo de menos, porque lo más importante era que la afición berciana disfrutara en directo de ver a su equipo frente a uno de los mejores de España y sobre todo que no hubiera lesiones porque lo importante que es la liga vuelve el sábado.Sin embargo, tumbar a todo un Atlético de Madrid siempre gusta y puede reforzar moralmente y la Ponferradina lo tuvo hecho, pues a falta de un cuarto de hora para el final ganaba 2-0.
Sin embargo la cantera colchonera salió al rescate, mejorando la imagen los de Simeone con un plantel repleto de jugadores del filial en el verde y remontando el partido con cuatro tantos en apenas 10 minutos para acabar ganando el partido por 2-4.
Con diluvio se saldó por tanto el partido del Centenario, tanto de goles como metereológico, con una intensa lluvia sin cesar de caer y condicionando un choque en el que Gallego usóa 21 jugadores, incluyendo a siete del filial (Moussa y Javi de inicio y Casta, Omar, Mancha, Raúl y Klein en la segunda parte), con Makaridze, Aldair y Derik Lacerda siendo los únicos que disputaron los 90 minutos de encuentro.
La Deportiva usó a siete jugadores del filial y sólo Makaridze, Aldair y Lacerda jugaron los 90 minutos Sin embargo, si hubo alguien a quien le vino bien el partido fue a Heriberto Tavares, necesitado de confianza tras una temporada en la que no le están saliendo las cosas y eso está haciendo que se ponga en duda su continuidad tras el mercado invernal, y que tuvo un chute de ella mostrando la llegada y la verticalidad que se esperaba de él y marcando dos goles.
Abrió el marcador a la media hora tras un maravilloso pase al hueco de Naranjo que dejaba al portugués frente a Oblak, un top mundial bajo palos al que sin embargo superaba en su salida con un buen disparo cruzado.
Heriberto resolvió bien ante Oblak en el 1-0 tras un gran pase de Naranjo y en el 2-0 le rebotó el rechace del meta Más dosis de fortuna tuvo en el 2-0, logrado a los 10 minutos de la reanudación, cuando aprovechaba el hueco que dejaba un horroroso centro de la defensa rojiblanco para recibir entre los zagueros y volver a plantarse ante Oblak, que esta vez le ganaba la partida deteniéndole el balón pero rebotando en el delantero blanquiazul el rechace y acabando en el fondo de la red.
Pintaba bien el partido para los de Gallego, pero en un visto y no visto todo cambió. Con cinco jugadores del filial en el verde en los bercianos y amplia mayoría de ellos en el Atlético de Madrid, donde ocho de los once eran ya del segundo equipo, los ‘cachorros’ rojiblancos dieron un paso adelante y a una semana de jugar en Copa mandaron un mensaje a Simeone sobre que puede contar con ellos, al igual que un Reguilón de cuyas botas nacieron los dos primeros goles madrileños.
Reguilón asistió en los dos primeros goles del Atlético y los canteranos Alber y Martín fabricaron los otros dos Porque una falta botada por el lateral fue cabeceada por Reinildo permitiendo al club rojiblanco recortar distanciasy, apenas cuatro minutos después, el propio Reguilón hizo una gran jugada por la banda izquierda, llegando a línea de fondo y poniendo un pase atrás para la llegada de un Alber que enviaba el balón al fondo de la red.
No se quedaría ahí la reacción rojiblanca, con otros dos goles separados por apenas tres minutos acabando por darles el triunfo. Ambos llevaron la firma de Carlos Martin, que en el 2-3 recuperaba él mismo un balón en campo propio y tiraba de él hasta acabar conectando con un Alber que se la devolvía con el pase de la muerte para que marcara; y en el 2-4 la conexión entre ambos protagonistas se repetía, con la Deportiva tocada por la remontada y Alber volviendo a asistir para el doblete de Carlos Martín.
Al final, triunfo rojiblanco pero buenas sensaciones de la Deportiva, que debe quedarse con el haber sido capaz de tutear a todo un Atlético cuando ambos conjuntos estaban con mayoría de jugadores del primer equipo.