En la EHF de 2013, cuando un penalti de José Mario Carrillo con el reloj a cero llevó al Ademar a la fase de grupos al levantar por el valor doble de los goles a domicilio los cinco goles de renta que el Nexe había conseguido en Croacia. En la Recopa de 2007, cuando otro croata, el Zagreb, había derrotado 26-20 a los leoneses en la ida, pero la escuadra ademarista ganaría 30-23 en la vuelta metiéndose en una final donde luego le derrotaría el Hamburgo.Son los dos precedentes a los que puede agarrarse el Abanca Ademar. Las dos veces en su larga historia europea en las que consiguió levantar una diferencia superior a los cuatro goles que este martes, a partir de las 20:45 horas en el Palacio, necesita remontar al Logroño para seguir vivo en Europa y entrar el jueves en el bombo que sorteará una fase de grupos a la cual, la última vez que accedieron vía cruce, fue también volteando una eliminatoria en León, en aquella ocasión goleando 29-21 a un Balatonfuredi que se había impuesto 29-23 en Hungría.
Ganar de cuatro les valdría a los de Cadenas si Logroño no llega a los 30 goles, habiendo prórroga si se repite el resultado de la ida y necesitando los leoneses una diferencia de cinco en caso de superar los riojanos esa cifra.
Boskos tiene casi imposible llegar pero Milosavljevic regresa. Logroño viene de golear por 38-30 al Sinfín Una tarea complicada para la cual apela al calor de la grada y el impulso del Palacio, buscando meter las 2.100 personas que en estos momentos permiten las restricciones sanitarias bajando los precios de las entradas (costarán 10 euros adultos, cinco infantil y gratis a los menores de siete años) y lanzando promociones como la venta con un 65% de descuento de las camisetas de la pasada temporada.
Con la afición de octavo jugador pero más piezas que en citas recientes afrontará el choque Cadenas, que contará con un Semedo que ya regresó en Córdoba de su larga lesión y con un Milosavljevic que apenas jugó en ese último choque liguero perdido por los leoneses (29-24) debido a una faringitis de la que ya está mucho mejor. Eso sí, quien parece tener casi imposible llegar es Boskos, aún convaleciente de su esguince en el ligamento lateral interno de su rodilla y que será baja como Antonio Martínez.
Todo para superar a un Logroño que ganó 34-30 en la ida y que el fin de semana logró su primer triunfo en la liga Asobal al imponerse por un contundente 38-30 al Sinfín, demostrando la mejoría que les ha supuesto la llegada del portero Merkelau, si bien es frenar a Leo Dutra, que les masacró en la ida, lo que obsesiona al conjunto leonés.