El gran inicio de liga dio cierto colchón a la Cultural y le permite que, pese a llevar cuatro derrotas seguidas, los leoneses sigan un triunfo por encima de los puestos de promoción de descenso.
Sin embargo, salir del bache cobra aún más importancia cuando tienes un partido que vale doble como el de este domingo, cuando a las 12:00 horas visite a un rival directo en la lucha por la salvación como el Clavijo, que es antepenúltimo a dos victorias de los leoneses pues tiene un balance de 3-7.
La reaparición de Greeley, cuya ausencia ha hecho muchísimo daño a una Cultural que sólo ha ganado uno de los seis partidos que se ha perdido, está cercana y de hecho viajará con el equipo a Logroño, pero hoy todavía no será posible por lo que los leoneses deberán volver a afrontar el partido sin él.
La mejor noticia para Luis Castillo es sin embargo que podrá contar con el base Roger Fábrega, que dio el susto el miércoles frente al Huelva al dañarse en el isquio en el último cuarto, pero cuya dolencia se ha quedado finalmente en un problema sin importancia que no le impedirá ser de la partida.
La llegada de Uriz soluciona el problema del Clavijo con el Baskonia, de quien tiene cinco jugadores cedidos
Todo para medirse a un Clavijo que estrenará entrenador, Ricardo Uriz, cuya llegada pone fin a la polémica con el Baskonia, con quien la escuadra riojana tiene un acuerdo que le hace tener cinco jugadores del equipo de Euroliga cedidos en sus filas, pero que por discrepancias sobre quién sería el sustituto del destituido no les permitió jugar en el partido de entre semana.
Ahora, tras colocar un técnico de la cuerda del conjunto vasco, a cuyo filial ha dirigido además de formar parte del cuerpo técnico del primer equipo, todo debería volver a la normalidad en un Clavijo que lleva tres derrotas seguidas, pero las dos últimas en la prórroga ante Caja 87 y el gran favorito al ascenso Cáceres.
En su pista ha logrado el Clavijo sus tres victorias (ante Algeciras y Zornotza por un solo punto y frente a Archena por 14), demostrando que no será ni mucho menos una pista sencilla para los leoneses.