Rubén Santos: "Me gustaría retarme en un nuevo Mundial"

La selección nacional de España, que ha dominado la clasificación general de principio a fin, se ha proclamado Campeona del Mundo de Salmónidos Mosca en los ríos del Principado de Asturias.

La semana pasada se llevó acabo el mundial de salmónidos mosca y la selección española se proclamó campeona del mundo. La medalla de plata fue para Francia y el bronce para la República Checa. A nivel individual el francés Julien Deguillanes se proclamó campeón, acompañado en el pódium por David Arcay en el segundo puesto y Rubén Santos tercero.

La selección española que compitió en este mundial estuvo formada por: Iñaki Muñoz, Ander Pérez, David Arcay, Andrés Torres, Jordi Oliveras y Rubén Santos. Destacando individualmente el gallego David Arcay Fernández, medalla de plata y el pescador leonés Rubén Santos Becerro que conquistaba la medalla de bronce. Un equipo español que competido excelentemente y que tuve que luchar hasta el final contra un combinado francés que lo dio todo, pero, se tuvo que conformar con el segundo puesto. Participaron 23 selecciones en esta 41º edición del campeonato del Mundo de la modalidad, disputado a lo largo de la pasada semana en diferentes ríos del Principado de Asturias.

Rubén Santos Becerro, campeón del mundo, accede gustosamente a una pequeña entrevista. Nos comenta que lleva pescando a mosca desde el año 1995. Y que su mentor y amigo por aquellos entonces fue José Manuel Cenador Cela. Su primer equipo fue una caña 9 pies #5, Shakespeare Timallus Young, también un carrete Shakespeare de carraca y una línea Cortland naranja.

–¿Cuál es el río que más te gusta como pescador a mosca?
–Soy ribereño del río Órbigo ya que soy de la Bañeza, por eso siempre será mi río más querido, aunque me gustan todos en los que se pueda pescar (risas).

–¿Qué te parece la gestión de la pesca en Castilla y León?
–Pues me parece un acierto total en cuanto a la pesca sin muerte se refiere desde hace ya varios años. Los datos del aumento de las poblaciones piscícolas ahí están, cualquiera puede consultarlos. Todo lo demás habladurías de bar…Claro está que hay otros temas que preocupan, pero el principal en mi opinión es este ya que se ha dejado de extraer y las poblaciones han subido.

–¿A seca o a ninfa?
–Por supuesto a seca. En este mundial he pescado un 80% a mosca. Pero no soy detractor de la ninfa, me gusta que me tiren del hilo y no soy de los que se pasan 5 horas a mosca seca sino pican.

–¿Pesca sin muerte?
–Sin duda. Hace un montón de años que decidí empezar a soltar las truchas. En parte gracias a la competición donde teníamos que soltarlas. Aprendí que valía más una trucha en el agua que en el arcón o en la basura en algunos casos.

–¿Pescas con tus propias moscas?
–Casi al 100%, tengo algunas pocas de amigos que se las pido por ser específicas, pero el resto las hago yo.

–¿Mosca, cuáles son tus favoritas?
–Barón rojo, oreja de liebre, fr34 y díptero negro. Con estas pesco casi todo el año y pocas más necesito.

–¿Tu mejor momento como pescador?
–Mi mejor momento como pescador fue el primer día que mi hijo quiso venir conmigo al río, pescamos, sacó sus primeras truchas y merendamos allí mismo. Jamás lo olvidaré. Como competidor, tengo 3: Cuando gane mi primer nacional en el Piloña en 2013, cuando gane mi primera semana internacional en 2016 y por supuesto ahora mismo que acabamos de ser campeones del mundo.

–¿A quién dedicaste este triunfo en el mundial?
–Esto lo tengo clarísimo, a mi familia, a toda. En especial a mi mujer Tere y mi hijo Rubén. Son los que están separados de mí cuando me voy de pesca y sufrimos mutuamente la ausencia, hay veces que se hace duro. También por supuesto a todos mis amigos y a los padres y abuelos del fútbol que somos una gran familia.

–¿A quién elegirías como referente en el mundo de la pesca de competición?
–Sin lugar a dudas, a Don Jordi Oliveras Cortina.

–¿Cuál es tu próximo reto?
–Creo que estoy en buen momento de forma, tanto física como mental, me gustaría asistir el año que viene a un nuevo mundial, en este caso a Eslovaquia, con ríos, peces y técnicas muy diferentes a las de aquí, un reto para todos. Pero eso no depende de mí, la federación decidirá cuales son los mejores deportistas para ir.

–¿Quieres añadir algo más?
–Quisiera añadir que sin mi mujer y mi hijo todo esto no podría ser posible, su apoyo, y su amor incondicional valen mas que todo el oro del mundo. Así también como el resto de mi familia sobre todo mis padres y amigos. Una anécdota es que el primer tramo que pesqué en el nacional del rio Piloña que gané en el año 2013, ha sido el último que he pescado con el rio barrado en este mundial. Ese tramo me lo ha dado todo en mi vida deportiva, tendré que ir a dejar huella en alguna de sus piedras.