Borja Fernández hizo saltar las alarmas en el Anexo Jesús Tartilán el pasado viernes al sentir una molestia en el mismo aductor que se lesionó en el comienzo de la temporada. Por este dolor, el medio centro no pudo participar en el partido contra el Amorebieta a la espera de que a comienzos de la presente semana se le practicara una prueba médica para averiguar si había recaído o no.
Una vez sabido el resultado de la resonancia, la tranquilidad vuelve a reinar, pues se ha descartado una nueva rotura y, de hecho, el jugador gallego ya ha vuelto a ejercitarse junto a sus compañeros en la sesión de este jueves para prerarar la visita a Ourense.
Con sólo 104 minutos disputados en Primera Federación y 72 en Copa del Rey, el exfutbolista del Algeciras, donde fue uno de los hombres más destacados en su demarcación durante la pasada campaña en el Grupo II, apenas ha podido contar para Javi Rey en las jornadas que van de competición. Unas molestias que ya sintió en pretemporada terminaron por provocar una rotura muscular que ha conseguido curar recientemente. Desde entonces, se encuentra en un proceso de integración a la dinámica grupal para sumar su nivel a un centro del campo que ya tuvo que lamentar la baja para toda la temporada de Nacho Castillo.