Tiene para elegir momentos malos el Abanca Ademar en la primera vuelta. Pero uno de los peores, por la manera de producirse y las consecuencias que tuvo, fue la derrota de la quinta jornada en la pista del Nava.De 8 goles (39-31) perdieron los de Manolo Cadenas, que hasta entonces sólo habían caído con Puente Genil y por uno ante Logroño, y que además perdían ahí hasta final de temporada por romperse el brazo a Jozinovic.
Frente a ese rival que le aplastó en liga, donde terminó la primera vuelta con seis puntos más que los leoneses, regresa mes y medio después a la competición el Abanca Ademar, recibiéndole este miércoles a partir de las 20:45 horas en el Palacio de Deportes en los octavos de final del torneo copero.
Una Copa para cambiar la dinámica y dejar una vía abierta para Europa en marzo, si es que entonces no pasar apuros para salvar la categoría ya no es la prioridad que se antoja en estos momentos, es lo que buscará un conjunto leonés para quien la mejor noticia es que por primera vez en la temporada estará al completo.
Jozinovic volverá a jugar un partido oficial cuatro meses después frente al equipo con el que se rompió el brazo Con Santista de vuelta el lunes y Kim el martes a última hora, más Jozinovic volviendo a las pistas contra el rival que le dejó KO hace cuatro meses, afrontará la cita el Ademar, que volverá a tener como tarea pendiente la que no fue capaz de solucionar en todo el primer tramo de competición: cerrar la defensa y reducir el enorme número de pérdidas.
Sobre todo ganar, pero a poder ser hacerlo por una diferencia que permita afrontar con ciertas garantías la vuelta que se juega dentro de una semana, el miércoles día 9 a las 20:00 horas, en el Pabellón Municipal Guerros Naveros.
Dos exademaristas: el meta Patotski y el central Rodrigo son claves en el equipo que dirige el mítico técnico Zupo Es lo que debe buscar el Ademar ante un equipo dirigido por un entrenador histórico y contra el que Cadenas vivió múltiples batallas por los títulos cuando dirigía al Portland San Antonio, Zupo Equisoaín, al que siempre se recibe con cariño en el Palacio; y que cuenta en sus filas con dos exademaristas que tienen además un papel capital en sus esquemas: el portero Patotski, que promedia un 34% de paradas (el mejor de los ademaristas es Bomastar con un 38%), y el desequilibrante central leonés Rodrigo Pérez, que vivirá otro duelo fratricida ante su hermano Gonzalo y es su tercer máximo goleador.
Cuenta también el Nava con el otro griego de la Asobal, Tsanaxidis, que se encontrará con sus tres compatriotas; y completan sus jugadores más destacado el veterano defensor y director Filipe Mota, el poderoso brazo lanzador de los laterales Prokop y Moyano, y el habilidoso extremo D’Antino, con Vujovic, Carró y Marugán completando su columna vertebral.
Eso sí, por encima de las individualidades destaca por ser un equipo sólido, rocoso y duro, cualidades que intentará emular Ademar para empezar el año dando una alegría a su afición.