Vallejo: "En León viví una etapa inolvidable que relanzó mi carrera"

Aunque su figura no se relaciona con los partidos decisivos, ya que acabó la temporada como suplente, en el histórico año del ascenso a Segunda de la Cultural el portero que más encuentros disputó fue Guille Vallejo.

24 disputó a las órdenes de De la Barrera el burgalés, que llegaba sobre el papel para el filial pero aprovechó los problemas físicos de Palatsí y Leandro para consolidarse en la portería. Sin embargo, tras su mejor campaña llegaron momentos complicados. Se fue cedido al Elche, con el que volvió a subir pero apenas disputó un par de encuentros; salió el último día de mercado el año pasado de la Cultural, quedándose sin equipo hasta que le reclutó unos meses el Sanse y después el Valladolid B; y en esta campaña, tras fichar por el Guijuelo, por fin ha recuperado la continuidad y es el dueño de la meta chacinera.

Con ellos se medirá el sábado, por primera vez desde el césped, a su exequipo, en una vuelta al Reino «especial y diferente, porque de la Cultural todo lo que guardo son recuerdos positivos: muy buenas amistades, gente que me trató muy bien, un público con el que me sentí respaldado desde el primer día...no puedo tener ninguna palabra mala hacia León».

«Todo lo que guardo de León son recuerdos positivos, no puedo tener ni una sola palabra mala» «Estuve muy a gusto. Fue una etapa inolvidable que además relanzó mi carrera, porque el único que tenía la idea de que iba a jugar era yo que siempre soy ambicioso, pero en principio la idea era ir al filial», recuerda Vallejo, que no guarda rencor por su salida a última hora el año pasado, ya que «la Segunda B es así, hay un cupo de mayores de 23, decidieron que continuara Palatsí y yo lo acaté»; y regresa «sin ningún ánimo de reivindicación, porque esa se realiza día a día, no en un partido».

¿Del choque en sí? Vallejo resaltade la Cultural que «ofensivamente tiene un potencial enorme y vienen de sacar los dos últimos partidos en casa con soltura ante dos equipos que pelearán por todo», pero confía en que «desde la solidez defensiva, la humildad y el compañerismo podamos hacer un gran partido y ponerles las cosas difíciles».

El meta ve la clave para dar la sorpresa «en el compromiso de todos y en estar acertado de cara a portería, porque estamos creando juego y ocasiones pero no nos entran»; y reconoce que a nivel personal llega «en un buen momento. Salí de aquí cabizbajo y tarde, lo que no me permitió encontrar acomodo, pero el jugar los últimos partidos con el Valladolid B el año pasado me dio vida para reengancharme y ahora me siento bien».