«Quizás hay a quien le sería complicado quedarse aquí todo el año, es un sitio con una cultura muy diferente y te tiene que gustar el modo en que hacen las cosas, su filosofía. A mí me gusta mucho, lo estoy disfrutando mucho y me está permitiendo aprender muchas cosas diferentes a las que estaba acostumbrados, ves las cosas desde otra perspectiva y me lo tomo como una oportunidad enorme». Así está viviendo el leonés los meses que lleva viviendo en Japón, donde hoy mismo comienza el motivo por el que está allí, un campeonato de ‘Super Formula Lights’ que arranca en el circuito de Autopolis. No era obligatorio quedarse a vivir en Japón, otros pilotos históricamente han ido y venido desde sus residencias habituales, pero Vidales tiene claro «estar dispuesto a todo lo necesario para ganar el campeonato». Así, en este tiempo en el que no ha habido competición y además de poder conocer el país, se ha quedado cerca de la fábrica de su equipo, B-Max, no solo aprendiendo japonés para poder comunicarse mejor con sus ingenieros y mecánicos, sino también empapándose de la cultura nipona del motor y conociendo los circuitos en los que competirá este año por primera vez: «Hay pilotos japoneses con los que voy a competir que llevan ya un par de años o tres en el campeonato, toda su vida compitiendo en estos circuitos, tengo que aprender muchas cosas que ellos ya conocen y recorrer ese terreno de ventaja que me pueden sacar, el único modo para estar luchando por el campeonato es trabajar más que ellos y yo estoy dispuesto a hacerlo, por eso me he quedado aquí, para esta a la altura y pelear con ellos».
Hay a quien le puede resultar difícil vivir aquí, el cambio es grande, pero yo lo estoy disfrutando muchoReconoce Vidales que «se han hecho largo» estos meses sin competición con un campeonato que comienza anormalmente tarde respecto a lo que está acostumbrado. «Siempre quieres estar montado en el coche y que empiece lo antes posible, pero han sido meses útiles para hacer tests y probar cosas que me han permitido prepararme mejor».
El objetivo lo tiene siempre claro el leonés, «ganar el campeonato», asegurando que «estar dispuesto a trabajar ese extra para igualar la experiencia que me falta respecto al resto» puede dar un plus confiando en un coche «que creo que tiene potencial para poder luchar por las victorias, la base es muy buena y desde los tests de Suzuka he tenido mucha confianza. Hay que seguir puliendo cosas y trabajando con el equipo, pero los ingredientes están ahí, los ingenieros y los mecánicos son muy buenos y si seguimos trabajando así se puede conseguir».
Asegura Vidales sentirse muy arropado por su equipo, que incluso le ha llevado como parte de su estructura al inicio de temporada en Super Formula, la máxima categoría de monoplazas en Japón en la que aspira a estar la próxima temporada: «El jefe del equipo me intenta involucrar con ellos para que aprenda todo lo que pueda y esté ahí con ellos, mi relación con los dos pilotos, tanto (Raoul) Hyman como (Nobuharu) Matsushita es muy buena, intento pasar todo el tiempo posible con ellos para aprender porque tienen más experiencia que yo, especialmente ‘Nobu’ que ha estado muchos años en Fórmula 2 y aquí está considerado como uno de los mejores pilotos, me ha venido bien estos meses para ver cómo entrenan, como actúan en la pista y cómo preparan las carreras».
Ha aprendido Vidales estos meses de otros, pero también otros han aprendido de él en Japón. De un tiempo a esta parte el piloto leonés viene trabajando con la división nipona de Tony Kart, uno de los gigantes del kart en el mundo y con el que el leonés corrió en su equipo de fábrica siendo subcampeón del mundo: «Si estoy aquí es también gracias a ellos, lo que hicieron por mí en su día no se me olvida y cuando me preguntaron si podía echarle una mano al equipo japonés no lo dudé, por mi parte todo lo que pueda hacer para ayudar a Tony Kart en cualquier sitio del mundo lo voy a hacer». El leonés colabora con los jóvenes pilotos del equipo «les ayudo con el ‘setup’, les pongo vueltas de referencia cuando es necesario y les hago un poco de ‘coach’, intento aportarles esa experiencia que tengo y cuando las carreras me lo permitan estaré con ellos en el campeonato japonés y en los tests que hagan».
Un nuevo formato
El aficionado leonés que siga a Vidales deberá acostumbrarse este año, además de a trasnochar por el cambio horario si quiere ver las carreras, a un formato muy diferente a lo habitual el año pasado en la Fórmula 3 o en general a lo que se hace en Europa. Cada fin de semana de campeonato va de jueves a domingo, con 4 sesiones de entrenamientos libres los dos primeros días, dos clasificaciones y una carrera el sábado y otras dos carreras el domingo: «Creo que un punto positivo de este campeonato es que en dos fines de semana ya vas a rodar más que en un año de Fórmula 3 en Europa, dar vueltas y hacer kilómetros para cualquier piloto es positivo porque generas experiencia y mejoras, además el hecho de que muchas pistas sean nuevas para mí hace que sea muy positivo tener esas 4 prácticas libres antes de la crono te permita aprender la pista y además desarrollar el coche, la mentalidad es diferente porque puedes probar mucho y trabajar con el equipo. Además el hecho de tener 3 carreras al final para un piloto es atractivo porque siempre quieres competir y todo es mucho más intenso, en F3 hacías una sesión al día y te ibas al hotel».Además, otra de las novedades importantes respecto a la pasada temporada es la reducción drástica de la parrilla, de los 30 coches de la Fórmula 3 europea a los 12 que competirán en este campeonato, 2 pilotos dentro de la categoría ‘máster’: «Reduce mucho las variables que no puedes controlar, que es uno de los problemas de la F3, que hay demasiados coches con pilotos que no tienen la experiencia para estar ahí. Aquí hay más experiencia y menos coches, lo que te permite centrarte en hacer tu trabajo especialmente en las cronos y depender más de ti, es una ventaja para los pilotos rápidos».