Mirando exclusivamente al césped y empezando por lo más cercano, los dos equipos se encontrarán en la segunda ronda de la fase de ascenso tras haber finalizado como segundos clasificados en sus respectivos grupos y remontar en la vuelta la primera eliminatoria con el mismo resultado, 2-0. Lo firmó la Deportiva para derrocar al Cornellá y lo hizo el ‘Efesé’ para superar a un Castilla que había ganado 3-1 en Valdebebas en la que sin duda fue uno de los momentos estelares de esa eliminatoria inicial.
Vidas paralelas también en la liga regular, en la que ambos equipos fueron líderes durante muchas jornadas para terminar acabando como segundos clasificados, manteniendo eso sí la Deportiva la ventaja de campo en esta segunda ronda fraticida entre subcampeones de grupo gracias al sorteo.
Tres caminos cruzados
Pero donde hay trayectorias paralelas también hay puntos en común y los próximos dos fines de semana se encontrarán sobre el terreno de juego muchos viejos conocidos, con tres jugadores en las filas de la Deportiva que recordarán momentos bien distintos al enfrentarse a un equipo que la pasada campaña fue sin duda el ‘pupas’ de la categoría al perder las dos finales por el ascenso que logró disputar.Sin duda uno de los protagonistas de la eliminatoria será Míchel Zabaco, como lo fue de forma involuntaria de la primera de la eliminatoria de campeones ante el Rayo Majadahonda la pasada campaña.
Zabaco fue protagonista involuntario de la dramática eliminatoria de campeones en la que cayó el CartagenaUn desafortunado gol en propia meta en el minuto 96 del partido de vuelta ante el conjunto madrileño privó al club albinegro de lograr el ascenso cuando toda la ciudad prácticamente lo celebraba. Una enorme decepción que tuvo su contrapunto en un Rayo Majadahonda que contaba en sus filas con otro jugador de la actual plantilla blanquiazul, Dani Pichín, que celebró el que por el momento es el único ascenso de su carrera esperando sumar dos seguidos consiguiéndolo esta campaña con la Ponferradina.
Tras el enorme palo que supuso caer en esa eliminatoria ante el Rayo Majadahonda, no bajó los brazos el equipo entonces entrenado por Alberto Monteagudo, que superó al Celta B para plantarse de nuevo en otra final por el ascenso ante el Extremadura, donde otro jugador blanquiazul en la actualidad celebró un nuevo ascenso en detrimento del Cartagena.
El portero Manu García fue pieza clave en ese ascenso extremeño incluyendo una final en la que la dejó su portería a cero tanto en la ida como en la vuelta, haciendo valer el único tanto de la eliminatoria en Almendralejo para celebrar un éxito del que disfrutó media temporada hasta recalar este mercado invernal en la Deportiva para tratar de repetir la historia.