Cuando la Ponferradina ya saboreaba un triunfo que le metía en el ‘playoff’. Cuando el mismo Deportivo que en la primera media hora había sido muy superior y merecido el gol parecía incapaz de penetrar en una zaga berciana que no había permitido ni una sola ocasión en toda la segunda mitad. Cuando la sensación era que iba a valer tres puntos el gol de Kaxe, en el rechace tras un tiro de Larrea en la que era la primera oportunidad berciana de todo el partido. Ahí, en el último suspiro, el guión cambió por completo.
El descuento más cruel posible vivió la Deportiva, que dejó escapar su preciado botín y acabó regresando de vacío de A Coruña en cuatro minutos de pesadilla, dignos del guionista más sádico, que dejan a los de Bolo con un regusto tremendamente amargo y suponen un claro paso atrás, de esos que recuerdas una y otra vez cuando la temporada va llegando a su final, en esa aspiración de acabar entre los seis primeros que se han puesto una vez que el objetivo de la salvación está virtualmente conseguido.
Fueron menos de 200 segundos, pero en ellos no pudieron pasar más cosas. Primero, en el minuto 92, a balón parado y en propia puerta acababa llegando el gol del empate. Sea en una falta directa, como en la que en la primera parte casi sin ángulo desde la derecha había rozado el gol tras envenenarse y coger efecto el balón pero reaccionar René, o en cualquier balón colgado o saque de esquina, cuando es Aketxe quien la pone siempre hay peligro. Y en un córner muy cerrado y con efecto hacia dentro, Trigueros iba a despejar de cabeza y acababa metiéndose el balón en su propia portería.
Trigueros cabeceó hacia su portería un córner de Aketxe. Era el 1-1 en la primera ocasión local de toda la segunda parte El Deportivo, que pese a meter en su área a la Ponferradina en el tramo final no encontraba huecos y desde el parón para hidratarse de la primera mitad no había vuelto a inquietar a René, se encontraba con un empate que ya sabía a oro... y que estuvo a punto de volver a perder.
Porque, en la acción siguiente, era la Ponferradina quien forzaba el córner, Omar quien colgaba un centro envenenado y Javi Navarro el que aparecía para conectar un gran remate, que iba abajo y pegado al palo, pero se encontraba con el tremendo ‘paradón’ de Dani Giménez, que se estiraba para llegar con su mano a un balón que iba directo hacia el fondo de la red.
Parecía que la victoria se le escapaba ya definitivamente a los bercianos, pero aún quedaba lo peor, porque en la siguiente jugada llegaba el 2-1 con una mezcla de acierto de los locales y pésima mala suerte de los visitantes, con una gran acción individual, una carambola de rechaces y una gran definición.
De 10 fue la jugada de Aketxe, que se iba por la banda con potencia y un caño a su par, al que dejaba en el suelo tras pisar área. De jugada de billar la resolución de su centro, pues rozaba en Manzanara, pegaba en Valcarce y de nuevo daba en Manzanara quedando el balón muerto en el área pequeña. Y de gran sangre fría la definición de Emre, que la enganchaba y superaba a un René al que como en el empate le faltaban reflejos para hacer el definitivo 2-1.
Dani le hacía un paradón a Navarro con 1-1 y, en la acción siguiente, Emre marcaba tras un ‘jugadón’ de Aketxe En un visto y no visto cambiaba por completo el choque y dejaba casi en anécdota todo lo vivido hasta entonces. Como esa primera media hora en la que la Deportiva, donde las rotaciones dejaban a tres titulares como Yuri, Son y Russo en el banquillo, sufría lo indecible para aguantar el 0-0.
Incapaces de frenar a Simón, que una y otra vez se incorporaba desde atrás y creaba peligro por la banda derecha, se iban sucediendo las acciones de peligro, con hasta tres muy claras.
La primera de Beauvue, al que tras un centro de Simón que rechazaba mal Manzanara le quedaba el balón muerto en boca de gol, pero que veía cómo el central de la Deportiva se rehacía y cortaba un disparo que se colaba. La segunda, el citado tiro de falta de Aketxe, en el que además los gallegos pedían penalti por un manotazo de Ivi a Mollejo. Y la tercera, la más clara, en un nuevo balón colgado por Simón que llegaba a rematar libre de marca y en el centro del área pequeña Mollejo, que cabeceaba en plancha pero buscaba colocar tanto el balón que se le acababa yendo por milímetros a la derecha de René.
Sin embargo, como ya ha sucedido en otros partidos, tras el parón de la media hora el panorama cambió. La Deportiva cerró filas, dejó de sufrir constantemente, firmó su primer tiro a puerta (de Pablo Valcarce, desde la frontal y fácil para el meta) y mantuvo el partido en ese escenario en el arranque de una segunda mitad sin claro dominador.
Mollejo ‘perdonó’ el gol en un cabezazo a bocajarro. Kaxe, en el rechace de un tiro de Larrea, puso el 0-1 Pero entonces, en el minuto 57, la efectividad que había faltado otros días hacía acto de presencia en la Deportiva, que hacía mortal su primer golpe. Fue tras un disparo desde fuera del área de Larrea, en el que tenía manos blandas un Dani Giménez que dejaba el rechace muerto y centrado, y Kaxe estaba mucho más listo que los tres defensores que le rodeaban para llegar el primero al balón y empujarlo al fondo de la red.
Lo más difícil estaba hecho. La Ponferradina se metía atrás y retrocedía claramente en su rendimiento con la entrada desde el banquillo de Omar o Fullana, pero aguantaba sin ocasiones. E incluso Yuri, en una contra, tenía el 0-2 pero veía cómo Mujaid cortaba su disparo. Y entonces, en el último suspiro, llegó la locura, la remontada y la primera derrota berciana en la reanudación de la competición.
Deportivo 2 - Ponferradina 1: 'El descuento más cruel posible'
La Deportiva aguanta en una mala media hora inicial, marca en su primera llegada y, cuando acariciaba el triunfo, recibe el empate en el 92, le hacen un paradón en el 93 y pierde en el 95
27/06/2020
Actualizado a
27/06/2020
Lo más leído