«Hay trabajo, tanto en San Millán como en la zona, pero lo que no hay son viviendas disponibles para que la gente pueda quedarse a vivir aquí», dice José Alberto, que ya ha rehabilitado dos casas en el edificio de las escuelas y prevé hacerlo con otra más con cargo a las ayudas de la Diputación de León del pasado año. Con una inversión total de 130.000 euros la idea es habilitar una vivienda más para el alquiler, llevar a cabo una reforma integral de las instalaciones del teleclub municipal y renovar el alumbrado público pasándolo a tecnología led. «Cada vez que sacamos el alquiler de una vivienda nos encontramos con cuatro o cinco solicitudes», cuenta para argumentar la necesidad de vivienda en el medio rural.
La corporación municipal de San Millán de los Caballeros tiene en mente seguir aumentando las viviendas destinadas al alquiler «para asentar población» y ahora bajaran la compra de un solar para dividirlo en varias parcelas y venderlo fraccionado para quien quiera construir vivienda nueva. «La gente que quiere hacer una casa aquí se encuentra con que las parcelas son excesivamente grandes, por lo que promover desde el Ayuntamiento la partición de alguna nos parece fundamental para evitar que vayan a buscarlo a otros municipios. Mi intención es arañar vecinos a Valencia de Don Juan, que la gente no se vaya y quede a vivir aquí», expone José Alberto que pone como ejemplo de asentamiento de población una iniciativa privada de seis chalets gracias a la que «muchos jóvenes han tenido la oportunidad de volver y ahora viven aquí con sus hijos tras haber estado antes en Valencia de Don Juan».
«Hay que ser consciente de que en un pueblo como San Millán no podemos generar puestos de trabajo pero sí dar facilidades para que la gente viva aquí», afirma. Para ofrecer a los vecinos del pueblo más servicios y que por tanto tengan más motivos para estar a gusto en él, el Ayuntamiento piensa también en reformar el Polideportivo Municipal. «Necesita un cambio total y habíamos pensado en acondicionarlo, hacer unas canchas de pádel, un rocódromo aprovechando las paredes del depósito... Convertir esa zona del municipio en un lugar atractivo para practicar deporte. Y si nos alcanza el dinero, también queremos cubrir la pista de futbito», cuenta el regidor. «En los pueblos pequeños no podemos pensar muy a largo plazo ni en obras faraónicas porque eso supone condenar las ayudas económicas que nos llegan de la Diputación y abandonar lo básico», reflexiona José Alberto, que entre esas ayudas de la institución provincial se encuentra el arreglo de la carretera de acceso a la N-630 desde el pueblo que ya está adjudicada a la espera de que empiecen las obras.