El abogado leonés Pablo Fernández, elegido secretario general de Podemos Castilla y León

El abogado leonés Pablo Fernández, del círculo Claro que Podemos, ha resultado elegido primer secretario general del nuevo partido en Castilla y León, con lo que se completa así la estructura autonómica, tras las primarias locales. Fernández, de 38 años, ganó en las primarias a los otros dos aspirantes, el vallisoletano José Alberto Rodríguez y el salmantino Fernando Gil.

Fernández Santos recibió 1952 votantes, 68.11 por ciento; Fernando Gil Villa 571, el 19,92 por ciento, y José Alberto Rodríguez 343, el 11,97 por ciento. Se emitieron 3402 votos, de ellos 2866 (84,24%) validos) y 536 (15,76%) en blanco. El Consejo Ciudadano fue elegido con 3209 votos (94,3%) de los 3402 totales, de los que 193 (5,67%) fueron en blanco.

En declaraciones a Ical, el nuevo secretario general calificó de “buen resultado” que más de 3400 personas, de un censo superior a 13.000 inscritos, haya votado en el proceso autonómico para elegir al secretario general, si bien admitió que han sido “muchas las votaciones” en los últimos meses.

Pablo Fernández, que tendió la mano a los otros dos aspirantes que no ganaron, explicó que desde mañana se pondrán a trabajar con todos los círculos y los sectores de la sociedad civil de Castilla y León para articular un programa de una mayoría social para una Comunidad, que consideró de “emergencia social”.

El nuevo líder de Podemos en Castilla y León llamó a trabajar para recuperar la mayoría social y facilitar el cambio en la Comunidad, con la derrota del PP, que en su opinión “ha gobernado para unos pocos”. Respecto a si encabezará la lista a las Cortes, manifestó que es una opción que no descarta pero añadió que debe reflexionar e insistió en la llamada al trabajo para conseguir el “ansiado cambio” en Castilla y León.

A las primarias autonómicas acudieron el leonés Pablo Fernández, de Claro que Podemos; el vallisoletano José Alberto Rodríguez, del círculo Despierta CyL, y el sociólogo salmantino Fernando Gil,'Podemos Castilla y León Plural. Somos círculos'. Además, otras 25 candidatura individuales en un proceso electoral que comenzó con la presentación de las candidaturas y terminó con la votación, cerrada ayer viernes, día 13.

De momento, el censo de posibles electores es de 13.024 y se espera que puedan ser más ya que para poder votar solamente se requiere la previa inscripción en el registro de la formación

Pablo Fernández, de 38 años, es licenciado en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, UCM y como autónomo regenta un quiosco en la capital leonesa. Entró en la ejecutiva del partido con el apoyo de 75.796 afiliados, es decir, el 74,51 por ciento de los que votaron y el líder de la formación, Pablo Iglesias, ya ha expresado su apoyo a la candidatura. Llegó a Podemos con la “convicción absoluta de que juntos se puede revertir la situación a la que nos ha abocado la casta político-financiera” y “la ilusión por un proyecto que trasciende la política, que es de vida y dignidad”, según defendió en su candidatura.

Entre sus mensajes, Fernández afirmó que han llegado para vencer en las próximas elecciones autonómicas de mayo, echar al Partido Popular que después de 30 años de gobierno “no ha hecho nada” y para “reconstruir y reconquistar” la Comunidad para los ciudadanos. “Si España es la periferia de Europa, Castilla y León es la periferia de la periferia”, sentenció.

En su campaña, Fernando Gil defendió que son “personas serias”, que no son “radicales”, como se les intenta definir, y como ejemplo citó su perfil, el de una persona que lleva dedicado desde hace más de 20 años a la docencia en la Universidad de Salamanca y a la investigación. Gil trasladó su interés por la renovación, pero alejada de un “cambio drástico” para los ciudadanos y destacó su interés por luchar para paliar aspectos como la desigualdad y la exclusión.

Por su parte, José Alberto Rodríguez abogó por “volver a repoblar el mundo rural” para terminar con uno de los principales problemas de esta Comunidad Autónoma, y apostó por la reindustrialización urbana y por una banca pública para que los castellanos y leoneses, con un tejido empresarial mayoritariamente formado por pymes, puedan volver a acceder al crédito.

En las elecciones europeas de mayo de 2014, Podemos obtuvo 78.360 votos en Castilla y León, el 8,17 por ciento, que la situó en la quinta fuerza de la Comunidad, pero la tercera en Burgos, León, Soria y Zamora, donde superó a IU y UPyD, y cuarta en Segovia.